Carlos Sainz atendió a DAZN minutos después de finalizar la sesión de clasificación del Gran Premio de Australia de Fórmula 1. El piloto de Ferrari no quiso ocultar su frustración tras acabar noveno en la Q3. Para el español, la última sesión fue "un absoluto desastre" y, además, habrá pocas opciones de adelantamiento en la carrera de mañana, por lo que la misión será más complicada si cabe.
"Hemos tenido una Q3 que ha sido un absoluto desastre. Primero con la bandera roja, que no nos ha permitido hacer una vuelta al principio de la sesión, que hubiese sido ya un buen tiempo para ponernos ahí delante. Nos ha salido la bandera roja justo cuando iba a cruzar la línea de meta".
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"Luego con el segundo set de neumáticos, el coche no arrancaba. Teníamos los neumáticos preparados para hacer una vuelta de preparación y luego tirar, y el coche por alguna razón no arrancaba, no hemos reaccionado lo suficientemente rápido, hemos salido a pista tarde y he hecho la vuelta con el neumático frío y sin poder calentarlo. Por eso estamos tan atrás. Hay que analizarlo, pero la verdad que ha sido un desastre la Q3".
"Nos han quitado la cuarta zona de DRS, por lo que adelantar será mucho más complicado. Además, este fin de semana parece que todos los coches estamos un poco más juntos. Red Bull y Ferrari no tienen la ventaja que quizá teníamos el otro día o en otros circuitos. Mañana será un día complicado, pero intentaré remontar todo lo que pueda".
Así fue la caótica Q3 de Carlos Sainz en Australia
Carlos Sainz no pudo luchar por la pole en la clasificación del Gran Premio de Australia de Fórmula 1. El piloto de Ferrari estaba ofreciendo un buen ritmo y todo hacía indicar que podría competir con Charles Leclerc y Max Verstappen por la primera posición, pero todo se torció en la Q3.
La mala suerte se cebó con el piloto español. Para empezar, una bandera roja le impidió hacer una vuelta al principio de la sesión, situación que no le permitió fijar un buen tiempo que le sirviera de colchón ante futuros contratiempos. Después, problemas con los neumáticos que le obligaron a salir más tarde y sin poder calentar las gomas.
Todo ello le llevó a Carlos Sainz hasta la novena posición, justo por delante de Fernando Alonso, que sufrió un accidente en la Q3 tras un problema hidráulico en su monoplaza justo cuando firmaba tiempos cercanos a los de la pole.