El Mundial de Fórmula 1 2022 alcanzó en el GP de Arabia Saudí la segunda cita del calendario, que acabó con triunfo de Max Verstappen sobre Charles Leclerc y Carlos Sainz, que de nuevo volvieron a demostrar el gran paso adelante logrado por Ferrari este verano.
Si en Baréin, en el estreno del campeonato del mundo, los dos bólidos rojos fueron primero y segundo, en Jeddah fueron segundo y tercero. Únicamente el talento de Max Verstappen que, a diferencia de lo ocurrido en Sakhir sí pudo acabar la carrera, pudo poner el color azul en el escalón más alto del podio.
Charles Leclerc, que al igual que el neerlandés también atesora un talento descomunal al volante, se está postulando, al menos en las dos primeras carreras, como la gran rivalidad de Verstappen en esta edición del campeonato del mundo.
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En esa terna quiere entrar, porque su coche se lo permite y porque, al igual que su compañero de equipo, también posee una habilidad fuera de lo común, Carlos Sainz, que fue tercero en Arabia Saudí.
En la vuelta 17, un accidente de Nicholas Latifi obligó a desplegar el coche de seguridad, por lo que los pilotos decidieron hacer la parada gratis para cambiar neumáticos y ganar adherencia en las siguientes vueltas.
En efecto, los cinco primeros clasificados, desde Charles Leclerc hasta George Russell decidieron pasar por boxes para cambiar las gomas y salir sin perder posiciones. Carlos Sainz, en cambio, sí se vio afectado.
Checo Pérez adelantó al piloto español con el coche de seguridad en pista y, a pesar de la insistencia del madrileño, que pedía por radio a su equipo que el mexicano le devolviera la posición, el Ferrari se quedó detrás del Red Bull.
A la salida de boxes, la línea de Safety Car 2, que delimita hasta qué punto se puede competir, la alcanzó antes, tal y como se comprobó en las repeticiones, el de Ferrari, por lo que Checo Pérez debía devolverle la posición.
Aquello no sucedió y fue en la resalida, con el de Red Bull en tercera posición, cuando Carlos Sainz tuvo que adelantar a su rival y recuperar la posición que tenía antes de su parada en boxes.
En la radio, Carlos Sainz demostró su enfado ante su equipo por lo que, a su juicio, era una lenta decisión de Dirección de Carrera.
"Me ha sacado de la pista, yo estaba por delante. Los comisarios deberían investigarlo. Yo creo que estaba por delante con el Safety Car. Creo que empujar a alguien cuando hay un coche de seguridad es peligroso y no debes hacer eso".
"Hemos reportado el incidente a los comisarios. Lo están viendo, estamos esperando respuesta". "Céntrate en la relanzada", le espetaron desde el muro de su equipo.
"No, no. La relanzada tiene que hacerse con las posiciones correspondientes, si no es injusto. Si yo estoy por delante de la línea tengo que salir por delante en la relanzada. No pueden tardar tanto. Es inaceptable", replicó el español. Su equipo respondió con un escueto "entendido". Pero Carlos siguió insistiendo. "Es que es muy fácil de ver. Estaba por delante de él en la línea del Safety Car".