Fernando Alonso ha despertado, de nuevo, la fiebre por la Fórmula 1 en España, que vive pendiente de las andanzas del bicampeón del mundo en su nueva aventura en Aston Martin, el equipo que más ha evolucionado de toda la parrilla.
El asturiano, en su priemra carrera oficial con su nuevo equipo, logró una meritoria tercera posición con el segundo coche más rápido de la prueba, únicamente superado por los dos Red Bull de Max Verstappen y de Checo Pérez.
Así fue la mala colocación de Alonso en Jeddah
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Fernando Alonso ha levantado la 'Alonsomanía' en todo un país, que anima al ovetense en su lucha por conseguir la 33ª victoria de su carrera, primero, y el tercer Mundial en Fórmula 1, después. Y Aston Martin tiene mucha culpa de ello.
La escudería propiedad de Lawrence Stroll, padre del actual compañero de equipo de Fernando Alonso, Lance, es la que más ha evolucionado durante el invierno y, en apenas un año, se ha situado entre las candidatas a plantar cara a Ferrari y Mercedes.
En el GP de Arabia Saudí, celebrado en Jeddah, el bicampeón del mundo español partía desde la segunda posición tras una extraordinaria clasificación realizada el sábado en la que concluyó en la tercera plaza, justo por detrás de Charles Leclerc y, con la sanción al monegasco, el asturiano pudo avanzar una plaza.
Allí, desde la primera fila de la parrilla de salida, y justo por detrás de Checo Pérez, Fernando Alonso realizó un formidable inicio de carrera, adelantando al piloto mexicano y colocándose en la cabeza de la carrera antes, incluso, de la primera curva.
Sin embargo, apenas unos segundos después de que se confirmara la primera posición de Fernando Alonso, la FIA comunicó que se estaba estudiando una posible mala colocación en la salida del Aston Martin pilotado por el español.
Justo después, la propia FIA ratificó lo informado y anunció que, en su primera parada en boxes, el piloto asturiano debía afrontar cinco segundos de penalización por la mencionada mala colocación en la parrilla de salida, donde Fernando Alonso se situó más a la izquierda de lo permitido, como se pudo comprobar en la cámara on board de Carlos Sainz.