En los primeros años del Siglo XXI, España tuvo un sueño que llegó a hacerse realidad aunque fuera por poco tiempo y de manera casi efímera. Aquel sueño era tener un equipo español en el Mundial de la Fórmula 1.
Adrián Campos, figura relevante en el automovilismo español, persiguió esa meta durante años y se la acabó encontrando encima de la mesa. Toni Cuquerella, actual comentarista de DAZN F1, desvela, en la última entrega de 'True Driver', la conversación que tuvo con Campos y que revolucionó el mundo del motor en España.
"Me voy a ver a Adrián Campos para decirle que en 2009 van a cambiar las normas para que en 2010 entrasen equipos con un límite presupuestario diferente, con unas ayudas por parte de la organización y que era la oportunidad que él tenía para poder entrar en Fórmula 1".
Toni Cuquerella fue director técnico e ingeniero de Hispania Racing Team, la escudería fundada por Adrián Campos, entre 2010 y 2012.
Las increíbles dificultades que atravesó HRT en la F1
DAZN
Tras analizar el proyecto y ver las posibilidades reales de llevarlo a cabo, el Hispania Racing Team vio la luz y pudo competir en el Mundial de Fórmula 1 en 2010. Sin embargo, la situación era delicada, ya que, a nivel económico, HRT estaba a años luz del resto de escuderías.
Pese a que el equipo de Adrián Campos acabó por delante de Virgin en el Mundial de Constructores tanto en 2010 como en 2011, la sensación era de precariedad, de dificultades enormes para poder competir en un escenario tan caro y exigente como el de la Fórmula 1.
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Durante el capítulo de 'True Driver', Toni Cuquerella hace hincapié en las gigantescas diferencias entre una escudería humilde y novata como HRT y otra colosal como Ferrari. "En Ferrari éramos 1600 personas, en HRT éramos 80. Para hacer un pit stop había que buscar gente".
Todo aquello era por un tema económico. El Hispania Racing Team no contaba con los medios suficientes como para ser un equipo competitivo. De hecho, ni siquiera tenía la garantía de poder subsistir mucho tiempo en la Fórmula 1.
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"Lo importante para la escudería era conseguir dinero para pagar facturas. Lo primero era cubrir las necesidades, que eran económicas. Los resultados deportivos no eran importantes si no tienes comida que comer", explica Toni Cuquerella.
Finalmente, en 2012, el sueño español de la Fórmula 1 finalizó por los tan manidos problemas económicos. Se trabajó a destajo, con ilusión y soñando con un futuro espléndido y prometedor, pero la falta de liquidez condenó un proyecto que ya nació herido de muerte por los escasos recursos existentes.