El fútbol es uno de los deportes más importantes que existen en el planeta. Por las emociones que despierta, por el seguimiento que hacen los aficionados de cada uno de los equipos del mundo, por lo que genera en las ciudades y, también, por los millones que se mueven entre las entidades.
Es en este último punto donde LaLiga Santander destaca como una de las grandes del continente. España, que en los últimos años se ha consolidado como poseedora de una de las cinco grandes ligas del mundo, atesora también salarios estratosféricos percibidos por algunas de las grandes estrellas del deporte.
De hecho, con Real Madrid y FC Barcelona como dos de los grandes clubes del mundo, LaLiga Santander atrae talento y diversifica sus ramas tratando de que el resto de clubes crezcan en consonancia.
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A los casos ya mencionados de merengues y culés se han unido, en los últimos cursos, Sevilla FC y Atlético de Madrid. En el lado de los hispalenses, gracias a un férreo control del talento mundial y a ventas superlativas han conseguido situarse en la vanguardia del fútbol europeo, convirtiéndose en un habitual de las competiciones continentales y logrando la gesta de levantar, en seis ocasiones, el título de campeón de la UEFA Europa League, más que cualquier otro club europeo.
El Atlético de Madrid, por su parte, basa su crecimiento en la llegada del Cholo Simeone. Desde que el técnico argentino se hizo cargo de la plantilla, los colchoneros han celebrado dos títulos de campeón de liga y han visto cómo su equipo ha alcanzado, en dos ocasiones, la final de la UEFA Champions League. Gracias a ello, el Atlético se ha convertido en un club atrayente para los grandes talentos del fútbol mundial.
Además de los cuatro grandes equipos del panorama nacional, hay otros conjuntos en LaLiga Santander que, en menor medida, también poseen jugadores de un alto nivel y que perciben grandes salarios, como Nabil Fekir, en el Real Betis, o Gerard Moreno, en el Villarreal, vigente campeón de la UEFA Europa League.
Por todo ello, y por la profesionalidad de las dos primeras categorías del fútbol nacional, los jugadores disponen de un convenio laboral colectivo que seguirá vigente, además, hasta 2024, con las revisiones anuales del IPC correspondiente.
En este sentido, la gran mayoría de futbolistas no están, en absoluto, cerca de cobrar lo que marca el convenio, situándose muy por encima del salario mínimo que un jugador de Primera División debe percibir en España.
¿Cuál es el salario mínimo de un futbolista de Primera División?
En España, los salarios están regulados por los diversos convenios laborales colectivos negociados por los trabajadores y vigente durante un periodo determinado de años, dependiendo del sector.
Por eso, los salarios de los futbolistas están establecidos a partir de un mínimo que, según el convenio, debe percibir cada uno de los jugadores que integran las plantillas de LaLiga Santander.
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Tal y como marca el citado convenio, el futbolista de Primera División de España que menos cobra percibe, al año, 155.000 euros. Se trata de 14 pagas de algo más de 11.000 euros mensuales, según el acuerdo alcanzado en 2016, y a las que se les iría sumando la revalorización anual del IPC.
Aunque el convenio no trata únicamente el salario, sino que también se centra en las condiciones laborales del trabajador. En el caso de los futbolistas, éstos tienen derecho a vacaciones retribuidas de 30 días naturales al año y, de esos, "21 serán disfrutados de forma continuada y el resto cuando las partes lo acuerden".
¿Cuál es el salario mínimo de un futbolista de Segunda División?
En el caso de LaLiga SmartBank, como categoría profesional, también se acoge al convenio laboral colectivo de futbolistas profesionales para España. Evidentemente, los salarios en la categoría de plata son mucho más bajos que en la élite, y eso también se refleja en el convenio.
A pesar de que la Segunda División española goza de un envidiable estado de salud, con multitud de equipos históricos, una competitividad sin igual y cada vez un mayor talento, los salarios de los futbolistas no se pueden comparar a los de LaLiga Santander.
Según el convenio, el salario mínimo que un futbolista profesional de Segunda División debe percibir es de 77.500 euros al año. Esto es, 14 pagas de 5.300 euros mensuales, además de la subida del IPC, al igual que sucede en los contratos de Primera División.
En cualquier caso, y como ya se ha mencionado anteriormente, las cifras que se manejan en la realidad difieren mucho de las cantidades mínimas que se estipulan en los convenios. Asimismo, varía también el sueldo que se percibe en cada uno de los clubes.
De esta forma, los jugadores peor pagados de FC Barcelona o Real Madrid, en LaLiga Santander; o de SD Eibar o Real Valladolid, en LaLiga SmartBank, podrían ser de los mejores pagados en el Levante, en el caso de Primera División, o en el Amorebieta, si hablamos de Segunda.