El Manchester United de Ralf Rangnick sacó adelante su partido de la 16ª jornada de la Premier League ante el Norwich City en un disputado partido en Carrow Road que se resolvió con un solitario gol de Cristiano Ronaldo de penalti, la única forma que tuvieron los red devils para desequilibrar el marcador.
Y es que el encuentro estuvo marcado por la igualdad reinante durante los 90 minutos, en los que ambos equipos dispusieron de ocasiones para marcar más goles de los que finalmente se produjeron sobre el césped del terreno de juego de los canaries.
De hecho, uno de los hombres más destacados del partido fue David De Gea. El portero español del Manchester United sostuvo a su equipo vivo en el encuentro y con los tres puntos en el bolsillo gracias a una estelar actuación que impidió, en todo momento, que los locales igualaran la contienda.
En la segunda parte, y con 0-0 en Carrow Road, Teemu Pukki se revolvió en la frontal del área y se sacó un zurdazo teledirigido a la escuadra derecha de la portería del meta español, que voló para, con la mano derecha, enviar el balón a córner y evitar que el Norwich se adelantara en el marcador.
Y, si buena fue la primera mano, la segunda que sacó no le va a la zaga. En el 76', a menos de un cuarto de hora para el final del partido, y ya con su equipo por delante en el marcador, los locales se volcaron buscando el empate. En una falta colgada al interior del área apareció la cabeza de Ozan Kabak que, con un testarazo abajo y a la derecha de De Gea, obligó al portero a lucirse para despejar la pelota y volver a salvar a los suyos.
Al final, el Manchester United pudo cantar una sufrida victoria en casa del colista gracias, sobre todo, al gol de penalti de Cristiano Ronaldo y a una nueva y soberbia actuación de su portero, demostrando que se encuentra en un estado óptimo de forma bajo la portería de los red devils.