El FC Barcelona recibía al RC Celta en el encuentro correspondiente a la octava jornada de LaLiga Santander. Un duelo que los de Xavi tenían la obligación de ganar para llegar en buena forma a El Clásico, que se disputará el próximo domingo y que se emitirá en exclusiva en DAZN.
Los futbolistas locales solventaron la situación con un triunfo gracias a un solitario gol de Pedri a pase de Gavi poco después de cumplirse el primer cuarto de hora de juego. El tanto del mediocentro canario acabaría resultando definitivo para que los catalanes lograran los tres puntos.
Durante un momento del partido, sin embargo, hubo algún jugador del FC Barcelona que no estuvo nada contento. La polémica apareció en el feudo culé y todos los ojos se centraron en el trencilla del vital partido del líder de LaLiga Santander.
En la primera parte, Raphinha dribló a Javi Galán, que dejó la pierna clavada en el césped ante el recorte del futbolista brasileño del FC Barcelona. Raphinha cayó en el área e inmediatamente reclamó pena máxima para el conjunto de Xavi Hernández.
Munuera Montero, árbitro del partido, no opinaba igual. Ante esta situación, el jugador blaugrana exigió al colegiado que fuera a ver la acción al VAR, puesto que estaba completamente seguro de que la acción era merecedora de penalti.
El árbitro, tras oír al VAR, volvió a aclararle al futbolista que no era penalti. Ante la insistencia de Raphinha, Munuera Montero le explicó que había saltado y que, por tanto, el contacto no había sido tal y había esquivado la pierna izquierda del jugador celeste.
La decisión indignó al atacante culé, que comenzó a repetir, una y otra vez, 'es penalti, es penalti', cada vez en un tono más serio y con un rostro más enfadado. Munuera Montero, sin embargo, no cambió su opinión y dejó la acción sin castigo.
Unos instantes después, las cámaras de Super8, programa exclusivo de DAZN, captaron al trencilla del envite hablando con el cuerpo arbitral sobre la polémica jugada que había desatado la ira del habilidoso futbolista local, visiblemente descontento.
"Pega un piscinazo de la hostia", aseguró el árbitro del partido por el pinganillo en una imagen recogida perfectamente por las cámaras de DAZN presentes en el Spotify Camp Nou que, aun así, vieron a su equipo ganar a un Celta muy combativo.