El Watford y el Manchester City cerraron la jornada de sábado en la Premier League con un partido repleto de ocasiones de los visitantes, que acabaron venciendo con comodidad para situarse en la cabeza de la clasificación.
De hecho, a los dos minutos de juego ya disfrutó Aymeric Laporte de la primera ocasión clara del partido. Un córner botado por Phil Foden desde la banda derecha encontró la cabeza del central galo en el segundo palo, que remató cruzando la pelota, pero João Pedro apareció bajo la línea para despejar in extremis.
Sin embargo, a los tres minutos ya el Watford no tuvo nada que hacer. Bernardo Silva cambió el juego de la derecha a la izquierda hacia la posición de Foden. Desde allí, el 47 citizen puso el balón en el punto de penalti buscando la cabeza de Raheem Sterling que, esta vez sí, puso por delante a los de Pep Guardiola en Vicarage Road.
El veloz futbolista del Manchester City buscó, a los ocho minutos de juego, duplicar la ventaja. Tras recibir en el vértice del área, el 7 citizen tiró de bicicleta para marcharse de su marcador y, con la pierna izquierda, disparar cruzado, obligando a Daniel Bachmann a intervenir para evitar el segundo gol visitante.
En ese saque de esquina, de nuevo botado por Foden, tuvo otra clara ocasión el conjunto de Guardiola. El internacional inglés colocó el balón en el punto de penalti para la aparición de Grealish, que remató a las manos del portero del Watford.
El Manchester City no cejaba en su empeño de cerrar pronto un partido que comenzó de una manera fulgurante. Jack Grealish, de nuevo a pase de Foden, tuvo un mano a mano, a los diez minutos de juego, para situar el 0-2, pero de nuevo Bachmann se lanzó con todo para evitar un nuevo jarro de agua fría para su equipo.
Pero los de Guardiola conseguirían, a la media hora de partido, su tan buscado segundo gol. Bernardo Silva filtraba el balón a Gundogan, pero su remate lo rechazaba el portero local. Aun así, el rebote le caería a Bernardo Silva que, tras ganar línea de fondo, lograba engañar a Bachmann e introducir el balón en la portería del Watford.
El segundo gol visitante no sentó nada bien al equipo de Claudio Ranieri, que desapareció del terreno de juego, entregando la posesión por completo a un Manchester City que se encontraba tremendamente cómodo sobre el tapete de Vicarage Road.
Tras la reanudación el guion de la película permaneció inamovible: los de Pep Guardiola encerraron pronto a un Watford que apenas podía salir de su campo y, fruto de ello, comenzaron a sucederse las ocasiones de los citizen.
A los seis minutos de juego de la segunda parte, Raheem Sterling se internó con comodidad en el interior del área, disparando centrado y obligando a Bachmann a enviar el balón a saque de esquina para evitar un nuevo gol visitante.
La segunda ocasión clara de los de Guardiola en la segunda parte la firmaba Foden, que disparó desde el interior del área para obligar al portero del Watford a intervenir, con ayuda del palo, para que el Manchester City no sentenciara el partido.
Aun así, el tercer gol del Manchester City llegaría en el minuto 63 de partido por parte de Bernardo Silva, que alojó el balón en la escuadra de la portería local con un zurdazo con rosca colocado al palo largo de la portería de Bachmann, firmando una obra maestra al alcance de pocos futbolistas en el mundo.
Tres minutos después, además, estuvo a punto de llegar el cuarto en un contragolpe conducido por Jack Grealish, pero el disparo del 10 citizen rebotó en la defensa del Watford y se estrelló en la parte superior del larguero de la meta local.
Pero el Watford no quería rendirse. A falta de un cuarto de hora para el final, el Cucho Hernández recortaba diferencias en el marcador tras aprovechar un rechace de un disparo de él mismo que se estrelló en el palo, levantando a Vicarage Road y animando a la afición de cara a un posible final de partido en el que los de Ranieri prometían dar guerra.
Y es que Joshua King tuvo en sus botas el 2-3 que habría puesto nervioso a un Manchester City que había tenido un partido plácido hasta el momento. Cucho Hernández centró el balón al interior del área y el atacante inglés remató desviado en una de las oportunidades de gol más claras del encuentro para los locales.