Ferran Torres tiene claro que quiere dejar huella en el FC Barcelona y ya está haciendo méritos para ello. En su segundo partido con la camiseta del conjunto azulgrana, el primero como titular, el exjugador del Manchester City se echó el equipo a la espalda y marcó un auténtico golazo que logró enmudecer a un estadio como San Mamés.
El canterano del Valencia estuvo lejos de achicarse en uno de los grandes escenarios del fútbol español y sacó todo su arsenal ofensivo ante el Athletic, que sólo pudo admirar la obra de arte que estaba a punto de presenciar. Ferran recibió el balón en el pico del área, miró a portería con decisión y disparó con rosquita para ponerla pegada al palo derecho donde no pudo llegar Agirrezabala, poniendo el empate en el marcador.
El internacional español, que venía de una larga lesión que arrastraba desde el City, se estrenó de esta forma como goleador del Barça. No marcaba desde el pasado mes de octubre, cuando hizo un doblete ante Italia en la UEFA Nations League.
La genialidad de Iker Muniain para adelantar al Athletic
El partido estuvo a la altura de las circunstancias y comenzó con un ritmo frenético. La cosa iba de golazos en San Mamés y antes de que llegara el de Ferran, el Athletic hizo de las suyas.
Poco después del pitido inicial, Nico Williams recibió un balón por la izquierda y dejó atrás a un Jordi Alba que no pudo hacer nada ante la tremenda zancada del jugador del Athletic.
El menor de los hermanos Williams le dejó un pase perfecto a Iker Muniain, que se sacó un remate sensacional que dejó sentado a ter Stegen y desató la locura de la afición athleticzale.
Pedri, el hombre prórroga
En el segundo tiempo, la intensidad del partido continuó creciendo, pero ninguno de los dos equipos lograba perforar la portería contraria. En el 86', Iñigo Martínez apareció para cazar un rechace dentro del área, se imupso a Piqué y el balón entró llorando para adelantar de nuevo al Athletic.
Poco después, Berenguer remató solo dentro del área, pero la acción quedó invalidada por fuera de juego. Cuando parecía todo el pescado vendido para el conjunto vasco, Pedri sacó su varita y mandó el encuentro a la prórroga, una más para el internacional español, el jugador que más alargues disputó la pasada temporada. El canario recibió una asistencia de chilena de Dani Alves y mandó el balón al fondo de la red.
El VAR fue el gran protagonista de la prórroga pues tuvo que intervenir hasta en dos ocasiones. La primera, para pitar penalti a favor del Athletic. Jordi Alba cortó un centro de Nico Williams con la mano en una acción de peligro clara para los de Marcelino. Munian engañó a Ter Stegen y marcó su segundo gol de la noche.
Tras un gol anulado al Barça por fuera de juego de Ferran Torres, el Athletic reclamó otro penalti. Piqué derribó a Iñaki Williams dentro del área, pero el VAR indicó que no había nada y dejó seguir el juego.
Los últimos minutos del encuentro fueron duros para los jugadores de ambos equipos, que estaban completamente agotados después del esfuerzo realizado durante todo el partido. El árbitro pitó el final con el 3-2 en el marcador y el Athletic se clasificó a cuartos de final de la Copa del Rey.
Duro palo para el FC Barcelona: Ansu Fati, otra vez lesionado
Además de la derrota, el FC Barcelona se fue con otra mala noticia de San Mamés: la lesión de Ansu Fati. El joven delantero se retiró entre lágrimas en la prórroga.
El internacional español notó un pinchazo en una disputa de balón y pidió el cambio cuando tan sólo llevaba media hora sobre el césped. Las primeras exploraciones apuntan a una posible lesión en el bíceps femoral de la pierna izquierda que le mantendría varias semanas fuera de los terrenos de juego.
Esta nueva lesión supone un duro palo tanto para el Barça como para el propio Ansu Fati, que había regresado hacía tan sólo una semana después de estar dos meses de baja.