El Espanyol logró tres puntos de un valor incalculable en Vallecas gracias, en gran parte, a la exhibición de Sergi Darder ante el Rayo. El capitán perico marcó un gol y dio pie al segundo, obra de Nico Melamed.
Con este triunfo, el Espanyol suma 34 puntos y se coloca a uno del Getafe, que marca ahora mismo la salvación. En la próxima jornada, el conjunto perico recibe al Atlético de Madrid en un choque a vida o muerte que puede marcar un antes y un después en la lucha por evitar el descenso.
Sergi Darder: "Si perdíamos estábamos prácticamente en Segunda"
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En declaraciones a DAZN, Sergi Darder reconoce que era un partido decisivo para ellos. "Si perdíamos hoy estábamos prácticamente en Segunda", resume el capitán del Espanyol con una contundencia innegable.
"Era una final. Si perdíamos hoy estábamos prácticamente en Segunda. La victoria de hoy, con el resultado de ayer en Getafe, te deja vivo, con mucha esperanza, dependiendo prácticamente de nosotros. Es un peso de encima que te quitas muy grande, pero la realidad es que parece que hemos hecho muchísimo y no hemos hecho nada".
"Tenemos dentro de tres días un partido clave. Nosotros solos nos hemos metido en un 'fregao' y no nos hemos dado margen de error, así que a ganar el miércoles".
"Aguantar lo que estamos aguantando, cuando lo damos todo y más, cuando el vestuario es la hostia y cuando ves que el míster lo da todo por esta camiseta y por este escudo es más duro que ver un vestuario dividido".
"Era una cuestión de impotencia y de ver que las cosas no salen aunque lo estemos dando todo. Hoy lo hemos buscado. Hemos hecho un partido espectacular, sobre todo en el ámbito de competir".
Por último, quiso mandar un mensaje a los cerca de cien aficionados del Espanyol que se dieron cita en el estadio de Vallecas. "Están locos. Yo no habría venido. Después de la hostia que nos llevamos el otro día en el derbi, hoy nos merecíamos cero personas aquí. No estuvimos a la altura en muchas situaciones. Esto es de agradecer".
Las lágrimas de Sergi Darder tras ganar en Vallecas
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Nada más terminar el encuentro entre Rayo Vallecano y Espanyol, con 1-2 favorable a los catalanes, las cámaras de DAZN captaron el estallido de alegría en el seno perico.
Luis García lo celebró junto a su cuerpo técnico, mientras que Sergi Darder, exhausto, rompió a llorar en una imagen que denota la liberación de toda la angustia acumulada durante tanto tiempo.
El capitán del Espanyol, tapado por una toalla y sentado, se derrumbó tras la importantísima victoria de su equipo. Poco a poco, sus compañeros se acercaron a consolarlo, conscientes de la importancia de Darder dentro y fuera del terreno de juego.