Augusto Fernández es el nuevo campeón del Mundial de Moto2. El piloto mallorquín tenía una ventaja de nueve puntos y medio sobre su rival, Ai Ogura, que arriesgó demasiado y se fue al suelo antes de que terminara la carrera.
En ese momento, Fernández ya tenía el título en la mano, pero quería redondearlo con un buen resultado en el GP de Valencia. El piloto español quedó segundo por detrás de Pedro Acosta y puso el broche de oro a una temporada de ensueño.
"Estoy creyéndomelo poco a poco, ahora veía todos los momentos y ha sido brutal. Estoy contento y orgulloso", asegura en una entrevista exclusiva con DAZN.
"Hace cinco años estaba la cosa chunga, estábamos intentando encajar en el Mundial. Ha sido un camino difícil, muchos años de mucho trabajo y sufrimiento. También años buenos, porque el primer año fue brutal. Pero vale la pena cada minuto de sufrimiento por este momento", continuó.
Los inicios de Augusto en el Mundial de Moto2, al que saltó directamente en 2017 del FIM CEV sin pasar por Moto3, no fueron nada sencillos, pero le ayudaron mucho a convertirse en el piloto que es ahora. Sin embargo en 2019, pudo darle la vuelta a la situación y llegó incluso a pelear por el Mundial con Álex Márquez. Finalmente, aquella temporada finalizó en quinta posición después de cometer varios fallos debido a la inexperiencia propia de un chico tan joven.
"Fueron años duros. Cuando creíamos que habíamos enganchado en las primeras carreras en Speed Up. Eso ha sido lo más duro, quizás el primer año en Estrella Galicia porque no sabía por qué estaba pasando eso y después de un año tan bueno en 2019 de llegar y besar el santo, luchar por el Mundial, ganar carreras y todo tan guay", explica en una charla con Ernest Riveras.
"2019 fue un año muy bueno, pero no era tan completo, por eso me descolgué luego de la lucha, no estaba tan preparado para luchar por el Mundial hasta el final. Era un año en el que todo iba bien, ganar iba bien, quedar décimo iba bien, no pasaba nada, eso se nota. Cuando estás corriendo así, el primer año, el equipo también brutal, me lo pasé también muy bien con el equipo que teníamos. Todo iba bien", cuenta.
"Me faltó un poco creer que era posible, madurez para seguir luchando por el Mundial hasta el final. 2020 y 2021 con Marc VDS, todo lo que hice en casa, cómo me preparé, era mejor piloto, pero no salían los resultados, por eso fue tan frustrante. Porque trabajé como nunca para ganar".
"Yo sufrí mucho en 2019, al final perdí el Mundial. Trabajamos muy duro y no salían las cosas y aquí estamos, le hemos dado la vuelta, orgulloso del camino que hemos seguido y de todo lo que hemos pasado para llegar hasta aquí".
Augusto Fernández y el emocionante momento con su padres tras ser campeón de Moto2: "Esto es gracias a ellos"
DAZN
"Se lo ha ganado a pulso. Estoy muy orgulloso. No ha sido nada fácil, pero es verdad que creo que todo esto nos va a servir para el futuro. Nos va a ayudar a lo que viene después, que serán buenos momentos seguro", explica el padre de Augusto Fernández en DAZN.
El piloto mallorquín agradece enormemente a sus padres todos los esfuerzos realizados para que él pueda estar donde está hoy.
"Gracias a él he sabido salir de los malos momentos y gestionar los buenos. Soy el piloto y la persona que soy sobre todo gracias a él, a mi madre y a él".
"Ha sido brutal. Lo difícil, que yo creo que todos lo sabéis, hubo un momento en el que parecía que no podía ser y al final lo hemos conseguido. Creo que nos ha venido bien saberlo ya porque nos hemos quitado un pesito de la mochila para ser libre y trabajar y merecerlo de verdad", apuntó su padre.
La madre de Augusto Fernández ha sido clave para el cambio de mentalidad de su hijo. Es profesora de yoga y sus métodos de concentración le han ayudado a lograr el título esta temporada.
"Normalmente no me hace mucho caso, pero este año lo hemos llevado un poco mejor. Mucho trabajo y relajación de la cabeza un poco y ha ido bien. Veo las carreras, pero paseando mucho y viendo y no viendo. Sufro mucho. Augusto es muy inteligente en pista", asegura Sara Guerra, madre de Augusto.
"Hace tiempo que es profesora de yoga y hace tiempo que hemos intentado trabajar de esa manera, la mente con ella, y nunca le he hecho mucho caso porque no sabía enfocarlo y ella ha seguido intentándolo, ha buscado la manera de enfocármelo hacia mí y este año yo también le he puesto más ganas y ella lo ha sabido enfocar de otra manera, hemos estado trabajando y me ha ayudado mucho", responde el piloto mallorquín.
"Para mí es un ejemplo, ya no sólo como hermano, sino como persona, me lo tomo como referente en mi vida personal. Tanto él como mi padre son referentes para toda la familia", añade el hermano de Augusto.
"Es un esfuerzo y un camino de todos, él lo ha sufrido, somos campeones del mundo la familia entera", apostilla el nuevo campeón del Mundial de Moto2.