Rafa Nadal es un auténtico ejemplo de superación. No sólo para los aficionados al tenis y para los niños, sino también dentro del propio mundo del deporte. Muchos deportistas de otras disciplinas se inspiran en la figura del mallorquín cuando están atravesando un mal momento. Es el caso de Marc Márquez, que en los últimos dos años ha tenido que lidiar con múltiples problemas.
El piloto del Repsol Honda Team sufrió un accidente en el inicio de la temporada 2020 de MotoGP en el Circuito de Jerez que le llevó a pasar hasta en tres ocasiones por el quirófano para poder recuperarse de una grave lesión en el hombro. El de Cervera no pudo regresar hasta el GP de Portugal de 2021 y, a pesar de no estar al 100%, consiguió tres victorias que reforzaron su moral. Sin embargo, una caída practicando motocross a final de año le acarreó unos problemas de visión (diplopía) por los que no pudo terminar el Mundial.
Ahora, Márquez, aunque sigue arrastrando algunas molestias en el hombro, está recuperado de todas estas complicaciones y se encuentra enfocado en regresar a lo más alto del podio y lograr su séptimo título de MotoGP. Para ello, tiene muy presente la figura de Rafa Nadal, que con su victoria en el Open de Australia demostró una fortaleza mental y un espíritu de superación que pocas veces se habían visto antes.
El tenista español protagonizó una remontada épica ante Daniil Medvédev y superó a Novak Djokovic y Roger Federer para coronarse como el tenista con mayor número de títulos de Grand Slam de la ATP (21).
"El ejemplo de Nadal es el soñado de cualquier deportista que pasa un mal momento y sale por la puerta grande", reflexiona Marc Márquez.
"Pero, ¿cuántos lo han hecho? Muy pocos. Se cuentan con una mano en toda la historia del deporte, y Nadal es uno de ellos. Por eso me motivó muchísimo ver su partido y la manera en que lo acabó", continúa.
Las carreras de Marc Márquez y Rafa Nadal están llenas de similitudes. Ambos han superado multitud de lesiones y mantienen su ambición intacta. A sus 28 años, Márquez no tira la toalla y sueña con levantar un nuevo Mundial, aunque sabe que no será nada fácil.
"Tengo que ser realista con dónde estoy y dónde quiero llegar. Si mañana hubiese una carrera no estaría para luchar por la victoria. Se pueden cuadrar las cosas, pero no estoy para luchar por la victoria", asegura.
"El año es muy largo, hay muchas carreras, muchas condiciones y muchos factores. El objetivo es hacer un año de menos a más, tomarme las cosas con calma, pero sin pausa. Las carreras van pasando y en menos de un mes estamos en la primera, e intentaremos ya luchar por los primeros puestos e ir sumando", concluye el piloto español.