Pecco Bagnaia aterrizó en el Mundial de MotoGP en 2019 de la mano de Ducati tras haberse proclamado campeón del mundo de Moto2. Cuatro temporadas más tarde y después de muchos malos momentos y mucho trabajo, el piloto italiano ha logrado hacerse con el título en la categoría reina.
A pesar de que ha conseguido darle la vuelta a la situación, los dos primeros años de Pecco en MotoGP fueron un auténtico calvario y según confiesa en 'Pecco Bagnaia, remontada de campeón', ya disponible en DAZN, se cuestionó si había tomado una buena decisión eligiendo Ducati.
"Cuando firmé por Ducati, era mi objetivo, mi sueño (ser campeón del mundo). Y cuando estaba en casa, a veces pensaba si había elegido bien, al mejor equipo para mi futuro. Y después siempre me decía: sí, es el mejor equipo. Este es mi sueño. Y que, si era capaz de ganar el título sobre esta moto y con este equipo, tendría un sabor especial", asegura.
"Yo sentía toda esa presión, todo ese peso sobre mi espalda y no fue fácil, pero también fue una motivación para conseguir esta meta. Estoy muy orgulloso de mi equipo del Mundial. Es increíble para nosotros".
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Pecco Bagnaia: "Tenía el potencial para ser campeón"
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Pecco Bagnaia cuajó una remontada espectacular de hasta 91 puntos ante Fabio Quartararo, que tuvo una primera parte de la temporada muy buena, pero fue desinflándose con el paso de las carreras.
"91 puntos eran muchos, pero yo pensaba en el potencial que teníamos. Yo pensaba que no era el tipo de piloto que sufre esas subidas y bajadas. Me consideraba mejor que eso. Yo pensaba que era competitivo para seguir luchando por el título. Creía que tenía el potencial para ser campeón", afirma Bagnaia.
"Creo que utilicé esa determinación, esa ambición para seguir ahí, para luchar por ello, porque entendía que era un piloto capaz de hacerlo. Y en el preciso instante que empecé a pensar en ello, cuando empecé a pensar que era competitivo, empecé a trabajar de forma diferente desde la FP1, en el ritmo de carrera, en las salidas… Y esto me ayudó mucho a estar más concentrado en el transcurso de la carrera. Esto me ha permitido también empezar a ganar".
"Empiezas a pensar que eres imbatible y eso es algo que, quizás no debería decirlo, pero cuando terminé segundo en Aragón, estaba enfadado porque no había conseguido la quinta victoria consecutiva".
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"Puede que Fabio fuera demasiado a la defensiva en esa parte del campeonato. No sé si metí demasiada presión sobre él, pero estoy seguro de que algo cambió. Porque en la primera mitad de la temporada ellos fueron más constantes, mientras que en la segunda empezaron a tener más dificultades".
"Estaba en una situación mejor que la de Fabio. Más fácil, seguro, porque él sólo podía ganar, y yo tenía que terminar 15º si él quería ganar el campeonato. Sin embargo, en estas situaciones es muy fácil cometer errores. Quedaban tres vueltas. Vi que Fabio iba cuarto, después de la caída de Jack Miller, y yo iba noveno. Así que sabía que era suficiente para ser campeón. Y ya en la última vuelta, cuando crucé la línea de meta, vi en mi pizarra que era el campeón del mundo 2022. En ese momento, todavía no entendía lo que habíamos conseguido".
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