Dicen que los grandes campeones se ven en los momentos difíciles y en el caso de Aleix Espargaró no podía ser menos. El piloto de Aprilia en MotoGP es uno de los más veteranos de la parrilla tanto por edad como experiencia y sus vivencias son el fruto de muchos de sus predecesores.
El natural de Granollers dio el salto a la categoría reina en 2009, precisamente en uno de los peores arranques de año de su carrera, y desde entonces no ha habido una temporada que no haya estado en el 'pit lane'.
Aleix Espargaró es el protagonista de la nueva edición de 'La Caja de DAZN' , donde recuerda uno de los episodios duros que pudo acabar con su futuro, de no ser por la ayuda de su hermano Pol Espargaró , además de muchas otras anécdotas.
Después de un final de la campaña 2008 en Moto2 un poco decepcionante por parte de Aleix Espargaró, su entonces equipo, el Lotus Aprilia, se disolvía. El piloto español tenía que reencontrarse a sí mismo y no fue fácil, como reconoció a Ernest Riveras: "Mi carrera deportiva ha sido muy desestructurada, seguramente en gran parte por mi culpa".
"La estabilidad sólo la he encontrado a partir de los 26-27 años y ha habido muchos baches en el camino", aseguró Aleix sobre ese período de antes en el que vio muy oscuro su futuro.
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Precisamente, menos de un año después, Aleix Espargaró volvía a ver la luz a mitad sustituyendo a un piloto oficial de 250cc primero y poco después debutando en MotoGP, convirtiéndose así en el más joven en hacerlo en esta categoría.
Pol Espargaró, su fiel protector
La figura de su hermano pequeño, Pol Espargaró, fue clave en su devenir: "Me echó un cable en esa época porque estaba yo en casa y me dijo 'no, no yo te pongo en sueldo y tú vienes conmigo a la pista, me ayudas, lo que haga falta".
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"Yo me sentía parte porque he sufrido, ayudado y vivido tanto con él, verle carreras que le ganaba Redding, verle llorar en el camión y yo levantarle y decirle: tío que este campeonato lo vamos a ganar y luchar los dos", recordó Aleix Espargaró sobre el Mundial de Moto 2 en 2013 que ganó su hermano.
Por último, Aleix echó un capote a Pol: "Él me sacó un poco de estar en casa, de no tener nada y de luchar y al final ha acabado pagando todo".