La suciedad, el barro y el polvo protagonizaron la primera de las jornadas de test de pretemporada de MotoGP en el circuito de Mandalika , en Indonesia . La lluvia caída obligó a sacar la bandera roja y a detener la sesión durante una hora y media.
Tras esperar a que los camiones limpiaran el trazado, la organización sacó a los pilotos de boxes para rodar durante, aproximadamente, 20 vueltas. El objetivo era comprobar si los tiempos bajaban a pesar de las dificultades. Así fue, las motos giraron más rápido y la sesión continuó.
Pol Espargaró finalizó en primera posición, justo por delante de su hermano Aleix, que volvió a confirmar que Aprilia está en un buen nivel y que opta a dar muchas alegrías a los aficionados en el Mundial de 2022.
Tras la jornada, el piloto catalán no se mordió la lengua y expresó su disgusto por la decisión que sacaba a los pilotos para que, con los giros de las motos, se limpiara el trazado.
"Las condiciones no eran buenas y, cuando nos han obligado a dar 20 vueltas a todos los pilotos, se ha limpiado sólo una línea. No me ha gustado la decisión, ha sido un mal día creo, pero al final lo que cuenta es lo que pasa en el box".
"La pista no estaba en condiciones de rodar, mucho barro y polvo y cada piloto, junto a su equipo, debe decidir cuándo salir a rodar o no, pero la organización nos ha obligado a todos a salir a rodar para limpiar la pista".
"Yo no estoy aquí para limpiar pistas. La única persona que me puede obligar a rodar es Massimo (Rivola, su jefe) o Colanino (CEO del Grupo Piaggio), como mucho. El jefe, como si quiere decirme que salga en bañador. No me pareció justo, para nada. Yo decido cuándo salgo".
"Otros presionaron porque necesitan más tiempo en pista. Me sentí mal, muy enfadado y decepcionado. Hacía mucho que no me enfadaba tanto. Lo pagué con mi propio equipo, que no tenía la culpa de nada, pero, después de tanto tiempo con ellos, es así".
Jack Miller, sobre Aleix Espargaró: "Es un arrogante"
Jack Miller, piloto de Ducati, atendió a los medios tras los test de Mandalika, en los que sufrió un percance con Aleix Espargaró, contra el que cargó duramente ante los medios de comunicación.
Aleix estaba siguiendo a Enea Bastianini cuando, según el australiano, en la penúltima curva del trazado frenó bruscamente. Miller iba tras él y tuvo que esquivarlo para no embestir la Aprilia del piloto español.
"Simplemente frenó de golpe en la penúltima curva y casi me lo como. Luego, me puse a su altura y revolucioné la moto. Pero él hizo ver que no se enteraba. Ya sabéis, Aleix haciendo de Aleix. Es un arrogante".