Alonso López sigue quemando etapas en el mundo del motociclismo. Su octavo puesto en el Mundial de Moto2 le ha permitido dar un salto de calidad y mirar hacia el futuro con optimismo. Pese a todo, su sueño, cuando era pequeño, no aparecía dibujado sobre dos ruedas, sino sobre cuatro.
"Yo quería ser piloto de coches y se lo dije a mi padre, pero me dijo que no, que de motos. Él corrió mucho en moto y llegó a ser subcampeón de España de dos y medio", confesó Alonso López en 'La Caja de DAZN', el programa en el que Ernest Riveras entrevista a gente del mundo del motociclismo de una forma diferente.
Dentro del mundo de las cuatro ruedas, el ídolo de Alonso López es Fernando Alonso, bicampeón del mundo de Fórmula 1 y que en 2023 se subirá a bordo de un Aston Martin tras una complicada etapa en Alpine.
"Fernando Alonso es mi ídolo número uno. Al final se llamaba como yo, veía que ganaba cuando era pequeño. Cuanto más tiempo pasa, más fan soy de él. Lo ves conducir y sabe hasta qué neumáticos pone el de delante aunque él vaya a trescientos por hora. Cada vez soy más fan. Con hacer lo que ha hecho él me conformo".
¿Por qué Alonso López tuvo que cambiar Madrid por Valencia?
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Alonso López ha firmado un gran año dentro del Mundial de Moto2, la categoría que, a su vez, es la antesala de MotoGP, donde ya compiten los Fabio Quartararo, Marc Márquez, Pecco Bagnaia, Aleix Espargaró y compañía.
El piloto madrileño finalizó el Mundial en la octava posición con 155.5 puntos. Ha sido el cuarto mejor español de la categoría tras Augusto Fernández (campeón), Aron Canet (tercero) y Pedro Acosta (quinto).
A sus 20 años (cumplirá 21 en diciembre), Alonso López está llamado a tener una gran carrera dentro del mundo del motociclismo. El de Boscoscuro ha sido invitado a 'La Caja de DAZN', el programa en el que Ernest Riveras entrevista a gente del mundo del motociclismo de una forma diferente, a través de objetos que ellos mismos sacan y sobre los que se entabla una conversación.
En uno de los momentos, Alonso López sacó de la caja una especie de boina que, evidentemente, le hizo recordar sus orígenes y su tierra, ya que él es madrileño. Lo que no sabíamos es que el piloto español tuvo que mudarse a Valencia para poder "entrenar y seguir mejorando" dentro de su carrera deportiva.
"La gorra de chulapo es porque soy de Madrid. Ahí es donde nací y donde empecé a entrenar. He crecido en Madrid y me trae muy buenos recuerdos. Sigo yendo todavía. No tenemos unas mega instalaciones y tampoco el clima nos acompaña muchísimo. De hecho, he tenido que venirme a Valencia para entrenar y seguir mejorando".