Checo Pérez vive este fin de semana su Gran Premio más especial con la disputa del GP de México de Fórmula 1, en el que correrá en casa y donde todas las miradas estarán puestas sobre su Red Bull. El piloto mexicano, compañero del líder del Mundial, tiene claro que es su gran momento.
Antes de la disputa de la carrera, Checo fue entrevistado para dejar sus impresiones ante un fin de semana único en su trayectoria. Durante la charla, el piloto de Red Bull habló sobre su compañero, sobre su adaptación a una de las escuderías más potentes del campeonato y, cómo no, sobre el regreso a México.
"Me fascina cómo Max Verstappen puede llegar al límite"
El mejor espejo en el que Checo Pérez puede mirarse es, sin lugar a dudas, Max Verstappen. Lo tiene a su lado, en Red Bull, y muy arriba en la clasificación. El piloto neerlandés es uno de los talentos más sólidos de la parrilla y en el Mundial 2021, en el que está pugnando con Lewis Hamilton por el título de campeón, está maravillando a todos.
"Algo que me fascina de Max es cómo puede llegar al límite. Muchos somos capaces de hacerlo, pero lo vamos construyendo a base de entrenar y probar durante el fin de semana".
"Él puede sacar el máximo rendimiento desde la vuelta 1 de la primera sesión de entrenamientos libres. Muy pocas veces comete errores. Creo que está en su mejor momento. Congenia muy bien con el coche y el equipo, es mi referencia".
"Es ilusionante tener un coche capaz de ganar"
Checo Pérez es, evidentemente, muy consciente de que posee un coche que tiene la capacidad de ganar carreras y disputar, cada fin de semana, la mayor cantidad de puntos posibles. Sin embargo, nada de ello sirve si no hay una regularidad y una adaptación que, en el caso del mexicano, no se dio desde su llegada al equipo austríaco.
"Estaba muy entusiasmado. Era una oportunidad increíble para mí, pero desafortunadamente me llevó más tiempo de lo esperado adaptarme. Llegué a un coche muy diferente a lo que estaba acostumbrado. Por eso tardé más de la cuenta en habituarme por varias razones".
"No conseguía los resultados que el equipo esperaba de mí. Y eso condicionó mucho mis resultados en el Mundial, pero es ilusionante tener un coche capaz de ganar carreras".
"Es genial volver a casa"
Por último, el piloto de Red Bull se mostró profundamente contento por regresar a México, su hogar, y poder correr en casa. Aunque ello conlleve una presión extra a la hora de saber que todas las miradas estarán puestas en él.
"Estoy muy ilusionado. Ya estoy completamente centrado en él. La espera ha sido larga. Llevo muchos años viviendo en Europa, pero todavía no siento que sea mi hogar, ni para mi familia. Es genial volver a casa. Después del GP de Estados Unidos aproveché para venir a México y pasar unos días con la familia".
"Es una carrera más, pero es muy importante. Mucha gente quiere que lo haga bien este fin de semana. Ahora depende de mí devolver ese apoyo en forma de resultado. Tengo que mostrar mi mejor nivel para estar a la altura".