Fernando Alonso y Brasil tienen una relación amor-odio en el Mundial de Fórmula 1. El piloto ovetense se proclamó campeón del mundo en el Autódromo José Carlos Pace en 2005 y repitió la temporada siguiente, aunque en 2007 tuvo que probar el sabor de la derrota en sus propias carnes.
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El 25 de septiembre de 2005 fue un día histórico para el deporte español. Entonces era la antepenúltima prueba del calendario -en este 2022 es la penúltima- y con su Renault rompía la hegemonía de Michael Schumacher con su Ferrari en el último lustro venciendo al Mercedes de Kimi Räikkönen.
El año próximo, llegaría Fernando Alonso con la posibilidad de repetir el título de F1 y no fallaría esta vez frente al siete veces campeón del mundo y en la última carrera, en el que significó el primer adiós del alemán de la parrilla de salida.
En 2007, ya a bordo de Mercedes se jugaba el todo por el todo precisamente en el GP de Brasil, en el desenlace del Mundial de Fórmula 1. Sin embargo en la lucha a tres más recordada, esta vez fue Kimi Räikkönen el que se llevó el gato al agua con un punto de ventaja tan solo sobre Lewis Hamilton y el propio español.
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Ahora, 15 años después Fernando Alonso aterriza en Interlagos sin presión en su Alpine más que terminar con la escudería que le ha hecho dos veces campeón del mundo -nuevo Renault. "Muchas cosas. Los dos Mundiales que ganamos, pero también los Mundiales que perdimos, un accidente en 2003...".
"Muchas cosas pasan aquí en Brasil. Es un sitio especial. Y este fin de semana con el formato sprint, todo puede pasar", avisa el piloto español antes de subirse a su monoplaza y recordando otro de los momentos sobre el Autódromo José Carlos Pace.
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Fernando Alonso espera la lluvia
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El piloto español siempre se ha caracterizado por ser un experto bajo las inclemencias metereológicas. El de Alpine asegura que "es una oportunidad más que una amenaza".
"Estamos mirando al cielo. La previsión es probablemente el mayor peligro si no estamos preparados para cualquier situación de lluvia en cualquier momento del fin de semana", concluye Fernando Alonso antes del GP de Brasil.