Hay frases célebres que pasan a la historia. Ya sea sobre una moto o dentro de un coche, los pilotos han demostrado a lo largo de los años que son personas extraordinarias, de las que pocas veces te cruzarías en la calle.
Entre todos ellos, los grandes campeones son los que han dejado una huella imborrable, no solo por sus proezas deportivas, sino también por su personalidad arrolladora y el carisma que han derrochado cada uno en su época.
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Estas son algunas de sus frases, las que a día de hoy nos siguen sorprendiendo por su crudeza y sinceridad, las de aquellos que nos enseñaron a disfrutar, sufrir y emocionarnos cuando nos sentamos a ver una carrera.
“Tengo 17 huesos rotos. Más que títulos”.
Ángel Nieto
“Los hombres cobardes ven la muerte muchas veces, los hombres valientes sólo una”.
Juan Manuel Fangio
“Cuando veo a Dios, sé que ha llegado el momento de frenar”
Kevin Schwantz
“Si hay que ser un payaso o un bocazas para tener carisma yo prefiero no tenerlo. Me pagan por ganar campeonatos”
Eddie Lawson
“Sólo viví una sensación igual a la del accidente de Nurburgring un día que fumé marihuana”.
Niki Lauda
“El piloto que nunca sintió miedo es un idiota”
John Surtees
“¿Tu papá es piloto? ¿Cuándo se va a matar?’, le preguntaban a mis hijos en la escuela“.
Jackie Steward
“Las carreras las ganan mis coches y las pierden los pilotos”.
Enzo Ferrari
“Mi mejor entrenamiento es el sexo”.
James Hunt
“Si algún día tengo un accidente prefiero morir. Soy una persona demasiado activa como para pasar el resto de mi vida en silla de ruedas”.
Ayrton Senna