Izan Guevara ha ganado el Mundial de Moto3 a lo campeón. El piloto mallorquín del GasGas Aspar Team se ha hecho con el título de la categoría de bronce del campeonato de motociclismo tras ganar en el Gran Premio de Australia.
Después de una pelea espectacular durante toda la carrera con su compañero de equipo, Sergio García Dols, y el de Red Bull KTM Tech3, Deniz Öncü, y el de Sterilgarda Husqvarna Max, Ayumu Sasaki, ha hecho historia con una victoria y, el entorchado.
En la última vuelta, Izan Guevara ha batido a sus competidores por el triunfo con un ritmo espectacular. El turco ha sido segundo, mientras su colega del GasGas ha completado el podio en el circuito de Philip Island.
Tras la celebración con Nico Terol, el que fuera campeón de la cilindrada de 125 cc -actual Moto3- en 2011 con el Aspar Team, con un casco con su número 28 y el mismo mono de equipo y un casco característico dorado, el nuevo rey de la categoría ha atendido a los medios de MotoGP y a DAZN.
Izan Guevara, radiante de felicidad
DAZN
"La verdad que me siento increíble, campeón del mundo. Una carrera increíble, una temporada increíble, una carrera fantástica", empezaba comentando Izan Guevara con unas gafas también doradas y una sonrisa de oreja a oreja.
"He estado empujando a tope, en la cabeza y ha sido posible ganar la carrera y me corono campeón del mundo. Muchísimas gracias a todo el equipo por todo el apoyo, a mi familia y a mis amigos", finalizaba el piloto mallorquín en el micrófono de MotoGP.
Pocos minutos después, Izan Guevara atendía a DAZN y se explayaba bien a gusto con un semblante radiante de felicidad: "He ido improvisando sobre la marcha porque no sabía como iba a estar en la carrera".
"Me cuesta hablar, estoy sin voz casi. Presión fuera, nervios fuera. Ha sido un año increíble con un inicio un poco complicado que fuimos remontando. Solo tengo palabras de agradecimiento a las personas que me han estado apoyando, a mi equipo, a mi familia, a mis amigos", agregaba siguiendo el mismo discurso.
"He tenido la mente en blanco, he gritado encima de la moto muchísimo y eso ha sido todo la verdad. Mi doble cuando me ha hablado ya sabía quién era. Encontrarnos en pista y haciéndome de doble, ha sido increíble. Le agradezco mucho porque ha sido mucho trabajo y sacrificio", insistía sobre el momentazo con Nico Terol y el momento que veía la bandera a cuadros.
"El ir a mi bola ha ganado mucho. Destacaría las seis carreras consecutivas que estuvimos en el podio que nos dio el momento de poder conseguirlo. En los momentos malos hemos aprendido y en los buenos, disfrutado. No hemos tenido muchos malos momentos. El último fue en Tailandia que no conseguimos dar con el clave, pero al final siempre salimos. Aún no me lo creo, estoy muy normal ahora mismo", finalizaba antes de intentar hacer el pino, uno de sus gestos característicos.