"Decíamos lo que se nos pasaba por la cabeza, sin filtros". Así recuerda Max Biaggi, expiloto de motociclismo desde 1991 a 2012, un tiempo en el que logró obtener seis campeonatos mundiales, cuatro de ellos en 250cc y dos más en el Mundial de Superbikes, y en el que mantuvo una intensa rivalidad con Valentino Rossi.
Biaggi, que coincidió con 'The Doctor' desde el año 2000, cuando éste último subió a MotoGP, relata, en exclusiva en DAZN para el reportaje 'RiVale' que repasa algunas de las rivalidades más intensas de Valentino Rossi, cómo vivió los años más duros de declaraciones cruzadas y de competitividad sobre la pista con una de las leyendas del motor.
"En aquel momento histórico yo creo que se necesitaba rivalidad, por ejemplo, con los dos italianos. Yo creo que no fue casualidad, se incentivó esta rivalidad".
"En 500, cuando nos encontramos en la misma categoría, no nos conocíamos, pero era como si ya lo conociese".
"Yo no elegí el papel de malo, igual que Rossi no eligió el papel de bueno. No sabíamos salir de ese personaje, de esa especie de encasillamiento. No había forma, porque de esta rivalidad tremenda hablaba todo el mundo, y siguen hablando".
Durante 'RiVale', Biaggi relata, además, un hecho desconocido hasta el momento porque jamás lo había hecho público. Y es que ambos pilotos tuvieron un encuentro en un ascensor de Motegi que acabó con Valentino Rossi alucinando.
"En Motegi estábamos todos en el mismo albergue, porque los pilotos se quedaban dentro del Twin Ring, y entramos en el ascensor él, mi fisio y yo. Estábamos solo los tres y yo recuerdo que pulsé el piso al que iba".
"En un momento, mientras subíamos, pulsé el botón de ‘STOP’. Miré a mi fisio, lo miré a él, y le dije: “oye, una cosa, ¿por qué me tocas tanto los cojones? ¿Por qué? ¿Qué te he hecho yo?” Y él, educadamente, me dijo: 'No, Max, no, yo no… Es el periódico, que dice eso…'".
"Se quedó alucinando. Casi, casi lo creo, en serio, estuve a punto de creérmelo. Pulsé de nuevo el botón, seguimos subiendo, y ahí se acabó. No volvimos a hablar de esto. Esa rivalidad saltó por los aires, pero podríamos haberla gestionado mejor, seguro".
Y es que, según Biaggi, "era el momento álgido de rivalidad". "Biaggi ha dicho esto, Rossi ha dicho lo otro". Era un polvorín, yo estaba ya harto y cansado. Empezaba a pesarme", recuerda el italiano en el contenido exclusivo de DAZN.