Williams trajo una novedad inusual a la Fórmula 1 que sería un completo descubrimiento para el mundo del automovilismo en el futuro, algo que demuestra la esencia de la cima del deporte.
Innovación y competición se juntaron cuando se creó el gran circo, dando pie a un gran número de invenciones que dejan atónito a cualquiera.
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Williams y el invento destinado a cambiar las reglas del juego en el Mundial de F1 que la FIA prohibió
Fórmula 1
El Mundial de F1, al igual que las competiciones de motor, han demostrado ser un gran elemento de progresión para la sociedad. Las novedades técnicas e investigaciones en los monoplazas han sido de gran ayuda para el mercado.
La gran mayoría de funciones que vemos en un coche de calle, ha sido probado antes en la Fórmula 1 o en otros coches de competición, donde nacen todas las novedades que llegan a los coches utilitarios.
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En 1993, Williams quería traer una nueva revolución a pesar de ser los defensores del título tras lograrlo la temporada anterior con un Nigel Mansell que casi dobló en puntos a su máximo perseguidor en la general, Ricardo Patrese.
La fábrica ya histórica por su amplia trayectoria y los grandes pilotos con los que ha contado, buscó una innovación que asombró a todo el mundo, en un motor que desplegaba una novedad increíble para el momento.
El nuevo Williams contaba con un sistema llamado Transmisión Variable Continua, que permitía mantener un alto régimen de revoluciones continuamente, hasta en puntos donde era complicado lograrlo.
Pero no solo eso, esto funcionaba con un sistema de cambios que trabajaba de forma semiautomática. Un monoplaza que presentaba además un gran número de novedades más allá.
El uso de telemetría y electrónica fueron otros de los componentes con los que contaba el FW15C, algo que para la época no se preveía y suponía una auténtica locura en lo que tecnología y vanguardia se refiere.
Todo ello conllevaba frenos antibloqueo y control de tracción, algo que sin duda era un gran apoyo para los coches tan peligrosos de la época.
Alain Prost logró ganar el mundial de esa temporada, pero todas las novedades que implantaron en este coche finalmente se prohibieron a finales de 1994, debido a que la FIA consideró que eran ayudas al conductor.