El deporte femenino lleva años luchando por la igualdad, por hacerse un hueco bajo el foco mediático, por sentirse valorado. Corren tiempos cargados de esperanza para todas aquellas niñas o adolescentes que sueñan con hacer algo grande en fútbol, motor o tenis, pero hay mucho por hacer y un largo camino que recorrer.
En DAZN hemos querido juntar a deportistas de la talla de Vicky Losada, Paula Badosa o Ana Carrasco, entre otras, para que nos cuenten su experiencia, cada escalón de su carrera y transmitan su mensaje con el fin de poder llegar a todos los rincones posibles.
Vicky Losada: "Que se cumpla un sueño es algo inolvidable"
Vicky Losada es una de las futbolistas más importantes de España. Tras ganarlo todo con la camiseta del FC Barcelona, la jugadora catalana fichó por el Manchester City, con el que espera tener una gran trayectoria que le permita seguir creciendo dentro del mundo del fútbol.
Losada reconoce que veía "alcanzable" el sueño que ahora está viviendo, aunque deja claro que haber cumplido su sueño en el Barcelona "es algo inolvidable" que quedará en su memoria "para siempre".
"Era algo que al principio, te definiría como inalcanzable porque hace quince años que empecé y era muy difícil con las condiciones que teníamos. Que se cumpla un sueño es algo inolvidable, y hacerlo en el club que me ha visto crecer se va a quedar en mi memoria para siempre".
"Por suerte, el fútbol femenino tiene medios para dárselos a ellas, para que disfruten y para que en un futuro puedan llegar a la élite, que también hay muy buena formación. El tútbol femenino está mejorando mucho, sobre todo a nivel de cantera".
"Yo tengo recuerdos muy bonitos de mi infancia, cuando jugaba al fútbol, cuando empecé con los chicos. Creo que son momentos que te quedan para siempre".
Lee más...
- Antonio Conte y la confesión que retrata la dura realidad del Tottenham
- Enea Bastianini y un triunfo eterno por Fausto Gresini
- La emotiva dedicatoria de Pol Espargaró: "Es un día especial"
- Jorge Lorenzo y su interesante reflexión sobre Marc Márquez
- Eddie Hearn está emocionado ante el combate entre Canelo y Golovkin
Más allá de su experiencia particular, Vicky Losada entiende que las mujeres deben unirse y apoyarse entre ellas para que el deporte femenino pueda crecer a pasos agigantados.
"Es importante que entre todas, no sólo en fútbol femenino, sino el deporte femenino en general, nos vayamos apoyando y nos interesemos las unas por las otras. Todo eso suma para que crezcamos juntas".
La futbolista del Manchester City siente que maduró "más rápido de lo que debería" por las piedras que encontró en el camino. Ahora, desde la élite, siente que puede ser un referente para futuras generaciones, algo que le ilusiona a la vez que le otorga una gran responsabilidad. "Hemos llegado para quedarnos", resume.
"Yo creo, y agradezco, que la vida me haya puesto muchas piedras en el camino, que yo he querido afrontar y que al final me han hecho madurar más rápido de lo que quizás debería cuando era más joven. Como nos ha costado tanto llegar a ser profesionales, y que realmente lo hemos trabajado, pues sabemos de dónde venimos y es algo que aún nos mantiene con los pies en la tierra".
"Con el paso de los años te das cuenta que, ahora, eres un referente para esas niñas y que tienes la oportunidad, y en mi caso la responsabilidad, de abrir esas puertas para el futuro del deporte femenino. Es tan solo el principio y queda mucho camino por recorrer, pero hemos llegado para quedarnos".
Paula Badosa: "Sin mujeres como tú yo no estaría aquí"
Paula Badosa es una de las mejores tenistas del planeta. Hace semanas se convirtió en la primera española en ganar en Indian Wells. Lo logró tras un épico partido ante Victoria Azarenka, a la que quiso dejar este mensaje minutos después de finalizar el encuentro.
"Recuerdo cuanto tenía catorce, quince años y te veía ganando Grand Slams y recuerdo decirle a mi entrenador que esperaba llegar a jugar como tú algún día. Así que, para mí, es increíble. Gracias por inspirarme tanto. Sin deportistas como tú y sin mujeres como tú yo no estaría aquí. De verdad, gracias".
Badosa recuerda que fue "un partido inhumano" el protagonizado ante Azarenka, aunque aquella victoria le permitió "dar un paso hacia delante" en su carrera.
"La experiencia más buena que he tenido en pista ha sido contra Victoria Azarenka en Indian Wells. Fue un partido inhumano donde yo jugué con una persona que respeto muchísimo y que admiraba mucho de pequeña. Ganar un torneo como Indian Wells fue una experiencia que me dio mucha fuerza y un paso hacia delante en mi carrera.
Ana Carrasco: "Desde que llegué hasta ahora he notado un cambio muy grande"
Ana Carrasco fue campeona del mundo de Supersport 300 y actualmente forma parte de la parrilla de Moto3, cuyo Mundial arrancó el primer fin de semana de marzo en Catar. Desvela que es "difícil" mantenerse en la élite y conseguir buenos resultados, pero reconoce que ha notado "un cambio muy grande" en los últimos años.
"Mantenerte en el Mundial mucho tiempo y, sobre todo, conseguir buenos resultados y ser competitivo es difícil. Para mí es algo normal ser la única o de las pocas chicas que compiten en el Mundial. Pero también es cierto que, desde que llegué el primer año hasta ahora he notado un cambio muy grande, especialmente a nivel de mujeres dentro de la familia del Mundial. No sólo de pilotos, también en la organización, en la televisión, en la clínica móvil, en todas partes".
Miriam Gutiérrez: "Quería volver a sonreír y disfrutar con lo que más me gustaba"
Miriam Gutiérrez es una luchadora, y no sólo por su pasión por el boxeo, sino por cómo ha afrontado siempre su vida. Hace tiempo hizo suya la frase "no importa lo fuerte que golpeas, sino lo fuerte que eres cuando te golpean", una especie de eslogan que ha ido acompañándola a lo largo de su camino vital.
Ahora ha vuelto al ring para "sonreír y disfrutar". Al fin y al cabo, la campeona del mundo WBA se siente como pez en el agua cuando se pone los guantes y entra en el cuadrilátero. "Ya pasó tiempo. Quería volver a boxear. Esa es la espina más grande que tenía en el corazón. Quería volver a sonreír y disfrutar con lo que más me gustaba. Me ayudó a superarlo todo".
Carla Suárez y cómo cambió Gran Canaria por un piso sin luz natural para perseguir su sueño
Carla Suárez es una auténtica luchadora. Lo ha demostrado dentro de la pista, armada con su raqueta y preparada para afrontar cualquier desafío en el plano deportivo, pero también fuera de ella...
Desde que en septiembre de 2020 anunciara que sufría un linfoma de Hodgkin, su batalla contra el cáncer ha sido un ejemplo de superación y coraje, desatando una ola de solidaridad por parte del deporte español que ahora celebra su regreso. Sin embargo, este no ha sido ni mucho menos el único obstáculo al que Carla ha tenido que enfrentarse...
El gran público seguramente desconocerá cómo de complicados fueron sus inicios en el mundo del tenis y todos los sacrificios que tuvo que afrontar para perseguir su sueño. El primero, y probablemente uno de los más duros fue tener que abandonar a su familia y Gran Canaria para poner rumbo a Barcelona, consciente de que su profesión le obligaba a fijar su residencia en la ciudad condal.
De hecho, a su madre le dio un buen disgusto cuando le dijo que iba a marcharse.
“Recuerdo que yo iba conduciendo en el coche y Carla iba detrás. Entonces me dice que iba a irse. Menos mal que a mí no me veían la cara porque estaba mirando la carretera. Me impactó”.
Los focos, los viajes, los grandes torneos... Todo eso quedaba muy lejos todavía. Carla era una chica llena de sueños y de talento con 18 años, pero que no se podía permitir demasiados lujos.
“Íbamos a Barcelona, igual era un grupo de 6-8 personas, con 2-3 entrenadores. Yo me acuerdo que había un piso que tenía dos o tres habitaciones con muchas literas y nosotros nos quedábamos allí”.
“Cuando yo decidí irme a Barcelona preguntamos si yo me podía quedar allí y me dijeron que sí. Era un piso que era un bajo, tú tenías que bajar unas escaleras y el piso bueno no tenía ventanas”, explica Carla.
Lee más | Rafa Nadal, que la tierra te acompañe
“Tú no sabías si fuera hacia sol o estaba lloviendo. Simplemente la ventana, la puerta pequeña que daba a un patio interior pero no se veía porque estaba también techado”.
Resulta complicado ponerse en el lugar de aquella joven e imaginar la determinación y la ambición necesarias para abandonar su isla, su maravilloso clima, sus amistades... y poner rumbo a un futuro incierto.
Pero Carla no fue la única a la que le tocó hacer sacrificios. Su hermano, José Suárez, también se embarcó en la aventura sin dudarlo.
“Mis padres en Canarias, yo también allí, ese piso un entresuelo que apenas se veía casi la luz del día, eso quieras o no marca mucho”.
Lee más | ¿Quiénes son los tenistas con más Grand Slam?
“Ahí ya fue cuando yo ya me fui a Barcelona para estar con ella, que no estuviese sola y ayudarla en todo lo que se podía. Yo estuve un año sin trabajar, solo ayudándola a ella”, señala.
Para aquel entonces, todos en la familia de Carla habían cerrado filas con una consigna clara. Que la apoyarían. Que estarían con ella a pesar de que no hubiera elegido un camino fácil. Ni siquiera su madre lo dudó, a pesar de que cuando vio el dichoso piso le dieron ganas de llevarse a su hija de vuelta a la isla. Ella había tomado una decisión, una decisión valiente. El futuro demostró que no se había equivocado por perseguir su sueño.