Quería volver. Por él, por su amor al fútbol y por el sueño de estar en el Mundial de Qatar. Y lo ha conseguido. Christian Eriksen regresó este sábado 26 de febrero de 2022 a un partido oficial. Más de siete meses después de desplomarse sobre el verde del Parken Stadion de Copenhague, con el Brentford, en Premier League y bajo una sonora ovación que pone los pelos de punta.
Y es que si el 12 de junio de 2021 quedó marcado como el día en el que una parada cardiorrespiratoria casi acaba con su vida, el 26 de febrero de 2022 quedará señalada como la fecha en la que Eriksen volvió a disfrutar del deporte que más ama.
"Es una meta, un sueño. Que me escojan es otra cosa, pero mi sueño es regresar". De esta forma pensó siempre y en consonancia a ella actuó un hombre cuya vida quedará por siempre definida por aquella tarde del 12 de junio de 2021.
En el minuto 42 del Dinamarca - Finlandia de la fase de grupos de la Eurocopa 2020, Christian Eriksen cayó desplomado. El danés, asistido en un primer instante por su 'ángel de la guarda' Simon Kjaer, sufrió un paro cardíaco y llegó a estar "muerto", según confesó el propio médico de la selección danesa.
"Lo recuperamos después con un desfibrilador", confesó Morten Boesen, médico de Dinamarca, tras una escena que obligó a suspender el duelo y que dio la vuelta al mundo.
Y es que el fútbol dejó entonces de ser lo más importante. Para Dinamarca y para las selecciones que en su camino se cruzaban.
Desde la afición finlandesa entonando el nombre del entonces centrocampista del Inter hasta Bélgica y el homenaje de Romelu Lukaku dedicándole un gol a su amigo.
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Una parte de todos pareció ir entonces con la selección danesa. Por él y por unos compañeros que honraron la palabra equipo. Protegieron su imagen, estuvieron con los familiares más cercanos de Eriksen y defendieron a su nación, hasta caer en semifinales, en su honor.
Un aparato eléctrico con la función de detectar y tratar distintos tipos de taquicardias no permitido en Italia, al no ser posible jugar con desfibrilador. De ahí que tuviera que rescindir su contrato con el Inter de Milán y buscar un nuevo destino.
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El que le ha brindado un Brentford que le ha 'devuelto' el balón. Tras un sinfín de pruebas con el objetivo de determinar que el danés, que confesó no esperar estar "así de bien", estaba listo para volver a la actividad deportiva de alto nivel y después de readaptarse a la práctica de un equipo de élite, volvió a un terreno de juego de forma oficial.
Llegó el minuto 52 del Brentford - Newcastle y llegó su turno. 259 días después de aquel fatídico día en Copenhague, Eriksen saltó de nuevo al verse en la que es una de las imágenes del año. La ovación emociona y habla por sí sola. Christian, bienvenido de vuelta.