Anthony Fowler insiste en que su inminente pelea con Liam Smith, en la denominada Batalla de Liverpool, será sólo una parte más de su viaje y no el final de su historia.
Después de una gloriosa carrera amateur que terminó con una decepción en los Juegos Olímpicos de 2016, Fowler se centró en los reconocimientos profesionales y en noches como la que está a punto de vivir.
La victoria de Fowler, quien llega como underdog frente a su rival, le impulsará a la escena mundial debido a los magníficos logros de Smith. Ex campeón del mundo, Smith ha hecho un trabajo ligero con todos sus oponentes nacionales, y sus únicos reveses se han producido al más alto nivel contra adversarios de élite como Canelo Álvarez y Jaime Munguía. Una victoria sobre Smith sería el punto culminante para algunos púgiles, pero Fowler dice que quiere conseguir más.
"Esto es sólo una parada en mi viaje", reveló un alegre Fowler al hablar en exclusiva con DAZN tras encarar al rival del sábado. "He tenido un viaje increíble en la vida. Pienso que donde empecé y donde estoy ahora es como un sueño hecho realidad. Estoy disfrutando del viaje, estoy agradecido por el viaje, pero soy un ganador y quiero más".
Un tema constante en la preparación del combate ha sido la sugerencia de que Fowler no tiene nada que perder al enfrentarse a Smith. Concediendo una gran cantidad de atributos y experiencia, se ha señalado que la derrota para Fowler no es el fin del mundo, ya que puede recuperarse de cualquier derrota con una salida contra una serie de rivales nacionales como James Metcalf, Ted Cheeseman y Troy Williamson. Fowler está dispuesto a descartar tales pensamientos.
"He sacrificado mucho por esta pelea. Apenas he visto a mi hijo. Lo he dado todo a este deporte desde que era un niño. Estoy aquí para ganar y sólo ganar. Créeme, he estado lejos de mi familia preparándome para nada menos que una victoria. Créanme, todo lo que quiero de esta pelea es una victoria".
Encerrado en el gimnasio de Shane McGuigan en Kent, los preparativos de Fowler se han centrado en provocar un choque que impulse su carrera hacia un probable combate por el título mundial en la división de las 154 libras, cargada de talento. Con tanto en juego en una pelea que puede marcar nuevos comienzos o duros finales para ambos púgiles, Fowler es categórico al afirmar que no se podría haber hecho más en la preparación para derribar a su enemigo en turno.
"Nadie ve lo que ocurre a puerta cerrada. He estado haciendo sólidos sparrings de 12 y 15 asaltos. Asaltos brutales y horribles con gente mucho más grande que yo. He hecho de sparring con Liam Smith en el pasado y sé qué esperar, ya que tiene mucha calidad. He practicado con un chico el doble de fuerte que él, créeme. Lo he traído en avión desde Rusia, le he pagado todos los gastos y me ha presionado como nunca. Sé lo que voy a traer a la mesa después de este campamento y por eso estoy tan confiado".
Vea lo más destacado de la reciente victoria de Anthony Fowler contra Rico Mueller.