Si algo conoce muy bien el legendario Bernard Hopkins es la sensación que genera enfrentarse a un pelador más joven.
Hopkins, quien tuvo un renacimiento tardío conquistando títulos y convirtiéndose en el primer campeón indiscutido en la historia del deporte moderno, encontró la clave para entrar en el Salón de la Fama desbaratando y poniendo patas arriba las carreras de varios púgiles más jóvenes.
Sin embargo, aunque Hopkins respeta a Manny Pacquiao - de 42 años - no puede ir en contra de Errol Spence Jr. a quien PacMan enfrentará el 21 de agosto en Las Vegas.
"Respeto a Pacquiao por aceptar el reto que está asumiendo", comenzó diciendo Hopkins a FightHype.com recientemente. "Va a ser un problema para cualquier boxeador por su habilidad y su experiencia y su longevidad. Esa es la clave... pero Errol Spence saldrá victorioso".
"Creo que Errol Spence está luchando en un nivel diferente de mentalidad - con esa segunda oportunidad en la vida", continuó Hopkins. "Estoy bastante seguro de que entiende que cada oportunidad que tiene para reflexionar todos los días - el boxeo o no boxeo. Después de ese terrible accidente... saber que vino de eso y luego subir al ring y pelear contra alguien que dice que lo va a vencer"
Hopkins no cree que esto último pueda compararse con lo que Spence ya ha superado.
"Y además de esa mentalidad, están sus habilidades".
Por todas esas razones, especialmente por esa segunda oportunidad, Hopkins da el visto bueno definitivo a Spence para que mantenga sus títulos alrededor de su cintura.
Por supuesto, B-Hop se refiere al devastador accidente sufrió Spence en octubre de 2019, apenas 12 días después de haber derrotado a Shawn Porter en una reñida victoria por decisión dividida.
Ese accidente hizo que el Ferrari de Spence volcara múltiples veces, expulsándolo de su asiento. Milagrosamente, el campeón mundial unificado pudo salir de los restos sin sufrir ningún hueso roto, para después regresar al boxeo y vencer a Danny García en el 2020.
Es esa "segunda oportunidad" la que Hopkins cree que servirá como toda la motivación que Spence necesita para levantar la mano contra Pacquiao en el T-Mobile Arena de Las Vegas.