Normalmente, las ruedas de prensa para anunciar una pelea importante son aburridas. Pero eso no ocurrió en la rueda de prensa del martes para promocionar el combate por el título indiscutido de peso supermedio entre Canelo Álvarez y Caleb Plant.
Al principio de la rueda de prensa, Álvarez y Plant fueron presentados. Se pusieron cara a cara y, en cuestión de segundos, el super campeón de las 168 libras de la WBA, dueño de los cinturones WBC y la WBO se quitó las gafas de sol y miró fijamente a los ojos de Plant. El campeón de la FIB se llevó las manos a la espalda y empezó a hablar con Álvarez, que le devolvió las amenazas.
Sin que nadie se interpusiera entre ellos, Álvarez y Plant siguieron hablando, sin que ninguno de los dos cediera. Entonces, Álvarez dio un fuerte empujón a Plant y le llamó "hijo de puta" tres veces. Plant se acercó a Álvarez y le lanzó un gancho de izquierda en bucle, que Álvarez retrocedió para evitar el golpe. A continuación, Álvarez golpeó a Plant con una corta mano izquierda en la cara, lo que provocó un enorme corte bajo el ojo derecho del estadounidense.
La sangre brotaba profusamente. Varias personas se apresuraron a intervenir en el escenario para asegurarse de que la situación no pasara a mayores. El enfrentamiento verbal continuó durante varios minutos antes de que Álvarez y Plant tomaran finalmente asiento para comenzar la rueda de prensa.
El acalorado enfrentamiento se debió en parte a que Plant insistió en la rueda de prensa en que Álvarez se drogaba para mejorar su rendimiento y era un tramposo.
Muchos expertos creen que Álvarez va a pasar por encima de Plant y se convertirá en el primer campeón indiscutible de las 168 libras. Sin embargo, Plant (21-0, 12 KOs) está deseando alterar el carro de la manzana.
"Lo único mejor que demostrar que la gente tiene razón es demostrar que la gente está equivocada, y eso es lo que he hecho toda mi vida", dijo Plant.
Álvarez (56-1-2, 38 KOs) tiene una idea diferente y planea acabar con Plant y demostrar por qué se espera que gane.
"Voy a noquearlo. A 8 asaltos. Fácil", dijo Álvarez con valentía.
"No está a mi nivel".