A seis años de haber recibido un disparo que puso en jaque su carrera, el cubano Julio de la Cruz conquistó este viernes la división de los pesos completos y sumó su segundo oro olímpicos al dar cuenta de MuslimGadzhimagomedov, del Comité Olímpico Ruso, en Tokio 2020.
El cubano logró recuperarse de la lesión sufrida en un asalto en menos de dos años y se presentó en Río 2016 para reclamar la presea áurea en peso semipesado.
"Lo que pasó fue duro, pero nunca perdí la esperanza. Los médicos cubanos me operaron. Gracias a ellos, a mi familia, entrenadores y psicólogos estoy aquí. Y mi mejor pago es cosechar títulos y darles las victorias que ellos merecen”, declaró a medios locales De la Cruz tras salir de la Arena Kokugikan.
De la Cruz llevó en esta final su boxeo al siguiente nivel y a pesar de la gran experiencia de Gadzhimagomedov nada de lo que probó le funcionó.
Con 31 años es aspirante al trofeo Val Barker, distinción que se le otorga al boxeador más destacado de los Juegos Olímpicos.
En su camino al oro, la Cruz derrotó al keniano Elly Ochola, al cubano-español Enmanuel Reyes y al brasileño Abner Teixeira.
Gadzhimagomedov derrotó al veterano argelino Abdelhafib Benchabla, al alemán Ammar Riad Abduljabbar y al neozelandés David Nyika para hacerse finalmente con la medalla de plata.
Los bronces correspondieron a David Nyika de Nueva Zelanda y a Abner Teixeira de Brasil.