Con la primera visita de Dmitry Bivol a un gimnasio de boxeo fue suficiente para que el ruso se enamorara del deporte y dejara el karate. En ese entonces tenía solo 5 años.
“En los 90 veía muchas películas populares de Jackie Chan o de Jean Claude Van Damme y yo quería pelear como ellos, le pedí a mi familia que me mandaran al karate y me llevaron, pero después de unos meses, me llevaron al boxeo. Y me enamoré. Me enamoré del boxeo porque el boxeo era más popular y tenían más competencias... además me gusta más pelear con mis manos mucho más”, dijo el peleador, que ahora tiene 31 años de edad.
Bivol es el actual supercampeón de peso semicompleto de la WBA y este sábado será retado por el mexicano y rey de los libra por libra, Saúl Álvarez, en un duelo que será transmitido a nivel mundial por DAZN.
Para Bivol el poder medirse ante el peleador más importante del momento es un reto que había estado pidiendo desde hace años, pues tiene deseo de probarse en grande.
“Estoy confiado porque soy uno de los mejores semicompletos, si no confías en tus habilidades, nunca ganaras no lograrás nada. Tienes que confiar en tus habilidades sin hablar demasiado de lo grande que eres, solo crees en ti”, dijo el peleador durante una mesa redonda con los medios tras la entrada oficial al MGM, con lo que dio arranque a la semana de pelea.
“Claro que quiero ser campeón indiscutido, Canelo es indiscutido y por eso lo respeto también. Un buen peleador tiene que tener un buen sueño como ser indiscutido, este también es mi sueño, claro que quiero todos los títulos, pero ahorita solo pienso en mi título”.
“No le tendré mucho respeto (a Canelo). Lo respeto como a mi último rival, él ha logrado demasiado. Pega duro, pero es mi rival. Lo respeto, pero es mi enemigo”.
“Me alegra, tengo un gran viaje en el boxeo, pues me acuerdo desde los cinco años en el boxeo y ahora estoy en Las Vegas y ahora voy a pelear aquí. Me alegra. Creo que el boxear desde tan joven no fue tan bueno para mi, porqué cuando me gradué me dijeron que la edad ideal para empezar eran los 11-12 años porque los niños solo se divierten, pero yo también me divertí en el gimnasio. Yo me recuerdo de chico, boxeando y ahora todo va a rendir sus frutos”, finalizó.