La presión por bajar de peso, verse atlético, entrenar fuerte y someterse a todas las cosas que los fanáticos consideran que es lo correcto, llevó al boxeador mexicano Andy Ruiz a recorrer un camino que no era el suyo.
Por eso, tomó la decisión de seguir su propio camino y luego de defenderse diciendo que era un “campeón gordito” y que esto no era “un concurso de físicos” aseguró que ha encontrado la calma y se siente feliz.
Este sentimiento llega de cara a su regreso, este domingo en la Crypto Arena, el boxeador de 32 años regresará para medirse a una dura prueba. En eliminatoria por título mundial de peso completo se medirá al experimentado campeón cubano Luis Ortiz.
“Estoy ya listo y he entrenado duro durante cuatro meses porque voy ante alguien diferente, pues, su estilo es súper diferente al de todos a los que me he enfrentado, pero la verdad es que me siento bien contento, pues, sé que hice las cosas bien en el gimnasio. Me ando poniendo las pilas, y mi equipo me ayuda mucho, me andan empujando a dar el máximo”, dijo en una videoconferencia durante una reunión con el WBC.
“Yo no me sentía bien perdiendo todo ese peso, de manera tan rápida, para un peleador como Luis Ortiz necesito estar fuerte, ágil, con buenos reflejos. Pero ahora nos enfocamos más en el boxeo que en bajar de peso y por eso estoy confiado en que llegaré mejor. Por eso ando feliz porque sabemos que el trabajo duro está y que hicimos las cosas bien”, respondió a la pregunta de DAZN News.
“Primero tengo que ganarle a Luis Ortiz, parece muy fácil, pero no. Si Dios quiere, voy a llevarme esta victoria. Y después todo viene fácil porque los dos (él y Deontay Wilder) estamos en la misma compañía”.
“Estoy listo para este septiembre 4 y quiero volver lo antes posible, en diciembre. Yo sé que tuve una larga ausencia, por mi operación y unas cosas. Pero estoy listo para pelear cada 4 o 5 meses. Estoy preparado, pues yo quiero tener ese campeonato. Cuando perdí con Joshua no hice las cosas bien, pero ahora es diferente”.