El nuevo campeón indiscutido Devin Haney celebró "el sueño hecho realidad" tras vencer a George Kambosos que lo convirtió en el campeón indiscutido del peso ligero, pero no podrá disfrutar por mucho tiempo de las celebraciones pues ambos púgiles ya se preparan para la revancha.
El estadounidense, campeón del WBC, volverá a casa con los cinturones de la IBF, la WBA y la WBO tras vencer al australiano por decisión unánime en el país de Kambosos.
En declaraciones tras convertirse en campeón de los cuatro cinturones, Haney dijo: "Esto es un sueño hecho realidad.
"Lo estaba viviendo sin que mi padre estuviera aquí. Ha sido un gran momento para los dos. Los dos soñábamos con ello. Cuando empezamos, dijimos que queríamos ser los mejores. Me habría dolido lograr esto sin él".
"Estoy muy agradecido. Alhamdulillah, papá, estoy tan agradecido."
"Me ceñí al plan de juego, golpeando y sin ser golpeado", señaló Haney. "Me tomé el último asalto porque sabía que iba cómodamente por delante. Hice una pelea buena e inteligente".
Sobre una revancha, Haney declaró: "Inshallah. Si Alá quiere que ocurra, volveré".
Kambosos se mostró confiado antes del combate, pero aceptó que la victoria se la había ganado su rival.
"Definitivamente no fue un factor", dijo Kambosos sobre su fracaso inicial en el peso. "[Haney] simplemente boxeó y mejoró su juego. Se movió, boxeó. No quiso mezclar, pero ese es su juego".
"Fue un evento increíble para este país. Quiero hacer las mejores pruebas y las más difíciles. Después de su victoria, le mostraré todo mi respeto. Dejaré que tenga su tiempo y lo volveremos a hacer".
"Voy a tomar algunas cosas de esto y espero volver a hacerlo a finales de este año".