En este momento, Canelo Álvarez es la atracción principal del boxeo en Norteamérica y el rey indiscutido de los libra por libra después de noquear el sábado a Caleb Plant para convertirse en el primer campeón indiscutido supermedio. Con su victoria, Álvarez también se convirtió en el primer boxeador mexicano en lograr la hazaña.
La mayor pregunta que surge es quién será el próximo rival de Álvarez. Algunos han dicho que una trilogía con Gennadiy Golovkin. Algunos han dicho que David Benavidez. Algunos han dicho también Jermall Charlo. El único nombre que no se menciona es el de Jaime Munguía, quien regresa el sábado por la noche para enfrentar a Gabriel Rosado desde el Honda Center en Anaheim, California.
Munguia, de 25 años, (37-0, 30 KOs) actualmente pelea en el peso medio mientras que Álvarez ha peleado sus últimos cuatro en 168 libras. Para algunos el tijuanense tiene madera para ser el heredero de Álvarez, de 31 años, por el estilo feroz que lleva al ring. Mientras que hay un montón de peleadores para mantener a Munguía ocupado por el momento, enfrentarse a Álvarez sigue siendo el enfrentamiento soñado.
"Definitivamente, eso es algo que estoy mirando en el futuro", dijo Munguía en entrevista con DAZN News. "Pero ahora mismo, estoy en 160. Canelo está en una categoría de peso más pesada. Una vez que me sienta bien con mi peso, mi cuerpo, y suba a esa clase de peso, y si ambos seguimos siendo los mejores peleadores en sus respectivas divisiones, entonces, por supuesto, me gustaría hacer esa pelea."
Mientras que un Álvarez-Munguía sería un acontecimiento importante en Estados Unidos, un enfrentamiento en su México natal se consideraría la principal pelea taquillera que se produjera en el país. Ese hecho es algo que Munguía cree y ha estado en su mente.
"Sí, sería una pelea realmente grande, histórica", dijo Munguía. "Probablemente uno de los eventos más grandes en México si esa pelea llega a darse. De hecho me emociono pensando en ello".
Antes de que pueda pensar en un potencial enfrentamiento con Álvarez, Munguía tiene en su camino al rudo y aguerrido Rosado. Rosado viene de una estrecha derrota ante Daniel Jacobs en noviembre de 2020 que muchos expertos consideraron que debería haber ido a su favor. El ex aspirante al título de peso medio en dos ocasiones se anotó recientemente un candidato al "Knockout del año" sobre Bektemir Melikuziev. Sobre el papel, se espera que Rosado sea el rival más formidable de Munguía. Es una evaluación con la que el mismo mexicano está de acuerdo.
"Sí, esta es la pelea más importante para mí", admitió Munguía. "Probablemente la pelea más importante para mí en lo que va de mi carrera. Tengo que dar el máximo esfuerzo para demostrar de qué estoy hecho el 13 de noviembre."
Según BetMGM, Munguía es un importante favorito para despachar a Rosado. Si Munguía se hace cargo del negocio de la manera que espera, se avecinan retos considerables contra rivales de la talla del campeón de la IBF Gennadiy Golovkin, el titular del WBC Jermall Charlo, el titular de la WBO Demetrius Andrade o Sergiy Derevyanchenko. MunguÍa tiene una idea de cómo le gustaría alinear sus próximas peleas, y algunos de esos nombres hacen el corte.
"Después de Rosado, me gustaría enfrentarme a Derevyanchenko y después de Derevyanchenko, si todo va bien, me encantaría una pelea contra GGG, o Charlo, (o) el próximo campeón del mundo. Estoy preparado para ello", dijo Munguía.