El peleador mexicano fue implacable con el estadounidense D´Mitrius Ballard y tan pronto lo vio herido se abalanzó para acabarlo. No habían transcurrido ni 10 minutos de iniciada la contienda.
La noche del sábado en la Plaza de Toros de Tijuana, el invicto ex campeón mexicano se impuso por nocaut en tres rounds al estadounidense no solo para mantener la corona intercontinental WBO y su posición número uno del ranking, también para arrebatarle la calidad de invicto a Ballard.
"Me ha costado mucho trabajo llegar aquí y lo he logrado gracias a ustedes... viva Tijuana", dijo el peleador que mejoró su récord a 39 triunfos, 31 por la vía corta.
Munguía, poseedor de un gran poder de puños, de inmediato mandó una advertencia a Ballard, quien al sentir la pegada se quedó en media distancia y desde ahí buscó abrir alguna ventana de oportunidad, pero experimentó problemas para encontrar al mexicano.
En lo que fue su quinta preparación bajo la tutela del ex campeón mundial y miembro del salón de la fama Erik Morales, Jaime mostró adelantos en la defensa, pues esta ocasión utilizó movimientos de cintura y de cabeza que le permitieron dejar en el aire los envíos de su adversario.
Ballard intentó adaptarse, pero para el inicio del tercero un potente puño lo mandó a la lona. Aunque se incorporó para seguir con la contienda, al siguiente embate del mexicano el referi decidió detener las acciones cuando el reloj marcaba 1:47 minutos.
El peleador mexicano habló de seguir presionando para que en este 2022 pueda disputar ese segundo campeonato mundial.