El sueño de Kid Galahad de convertirse en campeón del mundo se hizo finalmente realidad la noche de este sábado en Inglaterra luego de detener en 11 rounds a Jazza Dickens en un duelo por la corona vacante de la Federación Internacional de Boxeo.
Galahad, quien fracasó en su primer intento por conseguir la mismca corona en 2019, tuvo su propia revancha y conservó el control del combate durante gran parte de los rounds y a pesar de que ambos peleadores se conocían demasiado bien, pues fueron varias veces compañeros de gimnasio.
La labor de Kid se vio recompensada cuando Dickens y su esquina desistieron de salir para el último round.
Al igual que en su primera pelea en 2013, Dickens tuvo un gran comienzo y parecía que era el boxeador que estaba en la cima, ya que aterrizó una serie de golpes potentes y llamativos para los jueces. Sin embargo su actividad fue de más a menos, dejando la ventaja a Galahad para remontar y no perder el control el resto de la pelea.
A medida que la contienda se hacía más dura para Dickens, Galahad crecía en confianza al encontrar el objetivo con frecuencia. Con cada asalto que pasaba, la tensión de la contienda se hacía evidente en el rostro de Dickens, ya que una serie de cortes y magulladuras.
Cuando Dickens parecía estar muy por debajo en la tabla de puntuación y sus lesiones parecían amenazantes, se tomó la decisión de retirarlo a falta de tres minutos de combate. Con lo que sumó su segundo descalabro en duelo de campeonato mundial, ya que también fue superado por el cubano Guillermo Rigondeaux en 2016 en un duelo en peso supergallo por el supercampeonato de la WBA.
Esta decisión provocó las celebraciones de la esquina de Galahad que sumó un campeón más al gimnasio Ingle, pero poco tardaron en rendir tributo a su rival caído, ya que Dickens y Galahad comparten una amistad desde hace años y tan pronto como bajaron del ring lo fueron a encontrar al locker para consolarlo.