La irlandesa Kellie Harrington se recuperó de un accidentado primer asalto para destronar a la defensora del título olímpico, la brasileña Beatriz Ferreira, y hacerse con la medalla de oro en el peso ligero en Tokio 2020.
Ferriera se mostró bien en los tres primeros minutos antes de que la competidora irlandesa se adaptara con un cambio de guardia a zurdo y un enfoque más defensivo, que mantuvo magistralmente a Ferreira a raya.
La sudamericana se embarcó en un último ataque con la esperanza de salvar la contienda, sólo para comerse una enorme izquierda de Harrington al comienzo del round final que ofreció a los fanáticos una conclusión digna de fuegos artificiales.
Harrington, que fue declarada ganadora en todas las tarjetas de puntuación, lloró desde que bajó del ring hasta el podio, donde recogió la recompensa a años de trabajo en el gimnasio.
Es la primera vez que Irlanda ganó dos medallas de oro en dos deportes diferentes en los mismos Juegos Olímpicos, ya que los remeros Fintan McCarthy y Paul O'Donovan también triunfaron en el doble remo.
"Es fantástico. No veo la hora de volver a casa", declaró después a RTÉ Sport "Estoy absolutamente agotada, para ser sincera. Es un viaje fantástico.
"Ha habido momentos en mi carrera en los que la gente dice que todo el país te apoya. Esta vez, realmente siento que todo el país me apoya", continuó.
"La gente puede decir: 'eso es una presión' y puedes sentir que tienes un gran peso sobre tus hombros, pero en realidad no. Sabía que no importaba lo que pasara aquí, si era oro, plata o lo que fuera, sabía que me había hecho sentir orgullosa y sé que estoy haciendo sentir orgullosa a la gente de Irlanda, independientemente del color de la medalla".
"El mero hecho de estar aquí y poner a nuestra pequeña nación en el mapa es algo que hace soñar".
Katie Taylor, actual campeona mundial indiscutible del peso ligero como profesional, ganó el oro del peso ligero en Londres 2012 antes de convertirse en una de las tres mejores boxeadoras libra por libra.