El peso superwelter británico Liam Smith iba a iniciar el calendario de DAZN con un enfrentamiento contra el campeón mundial de los dos pesos, Jessie Vargas, el 5 de febrero. Sin embargo, un test de COVID positivo de Vargas obligó a posponer la pelea.
En declaraciones a The DAZN Boxing Show, Smith se mostró decepcionado por el retraso y espera que se pueda programar una nueva fecha más pronto que tarde.
"Estoy decepcionado, estaba listo para ir a Estados Unidos el próximo sábado. Era una pelea que esperaba con ansias desde hace varios años", dijo Smith.
"Mis pensamientos están con Jessie y espero que esté bien con COVID, pero mentiría si no dijera que estoy destrozado por la situación".
"Estoy tratando de hablar con Jessie ahora para ver cuál es la situación y espero que se pueda reprogramar un par de semanas más tarde".
"Me mataría si se retrasa más allá de marzo".
A la hora de hablar de por qué Smith tiene un deseo ardiente de enfrentarse a Vargas, el de Liverpool cree que los estilos de ambos darían lugar a una contienda entretenida y que le encantaría infligir la cuarta derrota profesional en el historial del estadounidense.
"Sin el título en juego, quiero peleas que gusten a los aficionados, y Jessie aporta eso. Dos ortodoxos, a los dos nos gusta pelear, ninguno de nosotros viene a aguantar y a hacer un asunto realmente peleón, siento que sólo se junta para una buena pelea".
"Por otro lado, es un campeón mundial de dos pesos que intenta convertirse en un campeón mundial de tres pesos, es un muy buen récord para tener en mi currículum. Sólo ha perdido contra Manny Pacquiao, Timothy Bradley y Mikey García".
"Cuando te retiras y son tus únicas tres derrotas, eso es un buen currículum para ti, así que quiero intentar añadir mi nombre a eso".
Tras una victoria por nocaut en el octavo asalto contra Anthony Fowler el pasado mes de octubre, algunos creían que a Smith aún le quedaba una carrera por el título mundial, pero el púgil de 33 años cree que será este posible enfrentamiento con Vargas el que determine si puede montar otro desafío por el título mundial".
"No quiero tener peleas por encima de los 33 años, he sido campeón del mundo. Puedo retirarme mañana y mi currículum me hace feliz, he sido campeón británico, campeón de la Commonwealth, campeón del mundo, pero quiero ver lo que me queda".
"Peleadores como Jessie me dirán la respuesta a esa pregunta".
"Si gano a Jessie, siento que me queda otra grieta en mí. Si no gano a Jessie no voy a ganar a un campeón del mundo".