Tarde o temprano, Shakur Stevenson iba a pasar a las 135 libras y ahora el cambio va a ser más rápido de lo que él esperaba.
Antes de su defensa del título de peso superpluma del WBC y WBO prevista para el viernes contra Robson Conceicao, Stevenson marcó 131.6 libras en la ceremonia de pesaje, 1.6 libras por encima del límite de la categoría.
Debido a que aseguró que le era imposible bajar el peso excedente, Stevenson fue despojado de los cinturones, aunque la pelea sigue en pie, pero sólo Conceicao es el único que puede ganar los títulos.
Stevenson publicó un comunicado en las redes sociales en el que confirma que no podrá llegar a las 130 libras y dice que su próxima pelea será en el peso ligero.
"Lo di todo", dijo Stevenson. "He sido profesional toda mi carrera y he hecho el peso, pero mi cuerpo simplemente no puede hacer 130 más. Mi salud tiene que ser lo primero. Voy a subir a 135 en mi próxima pelea".
Stevenson realizó la mejor actuación de su carrera en su último combate en abril, cuando venció al mexicano Óscar Valdez para conseguir los títulos del WBC y de la revista Ring. Pero, una pelea después, no defenderá ningún campeonato.